TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Al finalizar los ocho años de gestión del alcalde Nasry Asfura, en la capital quedarán habilitados 35 proyectos viales.
De este paquete de obras de infraestructura vial, 27 ya han sido habilitadas y ocho se encuentran en ejecución.
Desde el paso elevado en la salida a Danlí hasta el más reciente que es el túnel en La Reforma, se suman a la lista de obras que buscan dar solución al desesperante tráfico de la capital.
Algunos proyectos han sido bien recibidos por los capitalinos, por ejemplo la vía rápida sobre el río Choluteca, que ha sido un alivio para conectar el sector de San José de la Vega con el anillo periférico, pero hay otros proyectos viales que le han quedado a deber a la ciudad.
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Aníbal Ehrler, gerente de Movilidad Urbana, consideró que del listado de obras que se han habilitado hay tres que requieren ser reforzadas.
La primera es el paso elevado en El Prado, pues ya sobrepasó la carga que se estimó circularía por la obra. Antes de la pandemia la vía era utilizada por 80 mil conductores y fue concebida para tolerar el paso de 45 mil vehículos al día.
Otro de los proyectos viales es el túnel del Juan Pablo II, pues aún no está finalizado, ya que hace falta un paso elevado que daría mayor fluidez a la transitada zona.
El último aforo de la comuna revelaba que por la zona circulaban 50 mil vehículos, cuando antes de que se construyera el paso subterráneo circulaban unos 30 mil conductores.
Y la rotonda de la salida al sur es una de las más cuestionadas por los capitalinos.
Este proyecto fue construido solo para aliviar la carga de los vehículos livianos de la salida al sur, pues se tenía pensado que Invest-H iniciaría con las obras para conectar la aldea Santa Rosa con el anillo periférico.
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De manera que a toda hora en la salida al sur hay tráfico, la rotonda no es respetada por los conductores, pues lo cierto es que no se sabe en realidad quién lleva la vía, si el conductor que está dentro de la rotonda o el conductor que viene de una carretera.
Las autoridades locales evalúan la posibilidad de rediseñarla, sumado a la ampliación del puente Germania.
Además se apuesta por el transporte urbano masivo, pues de no hacerlo en unos diez años las obras viales ya no serían suficientes por el crecimiento de la flota vehicular.
Dino Rietti, expresidente del Colegio de Arquitectos de Honduras, consideró que se debe procurar incluir al peatón en los diseños y también que se mejore el paisajismo en las obras viales.
Por su parte, Gerson García, un capitalino, pide a las autoridades que evalúen la función de las obras para eficientarlas.
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