La Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) considera como accidente de tránsito los eventos por colisión, atropellamiento, aplastamiento, choque, despistes y volcamientos, incidentes que en dos años y medio (enero de 2017 a junio de 2019) han dejado 3,928 personas fallecidas, la mayoría por atropellamiento, según datos de la Secretaría de Seguridad.
Afortunadamente, el último de estos eventos solamente dejó a tres personas heridas; una de ellas fue golpeada por un carro cuando cruzaba por el paso cebras a la altura del bulevar Centroamérica, en la capital.
Los videos que captaron el momento son claros. La imprudencia de los conductores casi provoca una tragedia, que solo terminó en un aparatoso accidente, aunque no siempre es así.
A continuación les explicamos la problemática en seis sencillos gráficos:
Las calles y carreteras del país se transforman en una 'lucha por sobrevivir' a los atropellamientos, accidentes por exceso de velocidad u otro evento provocado por fenómenos naturales y hasta baches, pero de las 3,928 muertes registradas por la Secretaría de Seguridad en dos años y medio, hasta junio de 2019, el 36.1% fueron por atropellamiento, seguido del 32.8% por colisión.
Como deciamos al inicio, en Honduras la mayoría de las calles o carreteras no están hechas para peatones, por lo que coincide con la escandalosa cifra de muertes por atropellamiento (1,289) en los últimos 30 meses, hasta junio de 2019.
El gráfico muestra que los conductores y peatones son los más vulnerables al momento de los accidentes de tránsito, que en muchos casos no solo deja a una víctima sino varias.
En dos años y medio la cifra de muertes por atropellamiento ha disminuido en el país, especialmente al comparar el 2017 y 2018 que tienen una diferencia de más de 70 víctimas.
Las cifras muestran que hasta junio de 2019 unas 286 personas habían muerto atropelladas en el país.
El análisis realizado por EL HERALDO detalla que el 80.5% de los muertos por atropellamiento (1,142) eran hombres, lo que los convierte en los más vulnerables en las calles del país. Del total de víctimas, 275 eran mujeres y dos personas de las fallecidas están sin determinar su sexo.
Pero los datos muestran que no solo se trata del sexo de las víctimas, si no que la mayoría de fallecidos por atropellamiento eran mayores de 30 años (523 casos) y de la tercera edad (443).
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El 11.3% de los casos le ocurrió a niños y jóvenes, todos entre 0-17 años.
Cortés, con el 31.3% de los casos, y Francisco Morazán con el 20.8% se convierten en los departamentos más peligrosos para el peatón. El resto de muertes registradas ocurrieron en regiones ubicadas en el litoral atlántico y centro del país, donde hay mayor atracción turística.
