TEGUCIGALPA, HONDURAS
A simple vista, los enormes buques que pasan por las aguas de Honduras van cargados de contenedores con millonaria mercadería.
Las autoridades no hacen más que darles las facilidades de tránsito y garantizar su seguridad sin impedir el comercio.
Pero nadie sabe qué trae escondido entre la multitud de mercancía cada embarcación.
Los kilos de cocaína pueden venir ocultos en cualquier rincón, incluso, afuera de la embarcación. Identificarlos no es fácil.
Fuentes de la Fuerza Naval de Honduras (FNH) explicaron a EL HERALDO que nadie sabe qué lleva un barco, se necesita trabajo de mucha inteligencia para identificar si en medio de la carga va droga. Lo mismo sucede con las otras embarcaciones que circulan por los océanos Atlántico y Pacífico, por donde pasan toneladas de droga cada año.
No hay radar o Sistema de Posicionamiento Georreferencial (GPS) que identifique con precisión qué lleva el barco.
No obstante, el control y seguimiento de cada una de las embarcaciones es necesario para cada nación.
La Dirección General de la Marina Mercante (DGMM) trabaja en la compra de un Sistemas de Gestión del Tráfico Marítimo (VTS), el cual, según sus promotores, será de mucha utilidad para combatir la criminalidad marina.
Este sistema proporciona en tiempo real un escenario operacional integrado que permite mejorar la seguridad marítima, la eficacia en la planificación del tráfico, la protección medioambiental del agua y la seguridad de las infraestructuras del puerto, según los informes proporcionado al HERALDO.
Seguimiento
La red de estaciones se instalará en seis departamentos que son Cortés, Atlántida, Colón, Gracias a Dios, Islas de la Bahía y Valle.
El sistema VTS tendrá sensores de multiseguimiento, que conectarán toda la información del radar y del Sistema de Identificación Automática (AIS) de barcos para fusionarla en un único escenario.
Esto permitirá tener las herramientas automáticas necesarias para seguir barcos, ayudar a la navegación y generar alertas en caso que se detecten situaciones irregulares.
Las especificaciones técnicas indican que se podrá tener planificación, monitoreo y notificación de las zonas portuarias en tiempo real.
Honduras está tomando como base el sistema iMARE, que es una solución de software, totalmente desarrollado por la empresa que ejecutará el proyecto, para cubrir todas las funcionalidades de un VTS. Lo anterior significa que proporciona al operador una visión clara y concisa del escenario marítimo, que agrupa y fusiona toda la información de los sensores en una interfaz hombre-máquina de uso muy fácil.
En este proyecto, el sistema iMARE se encargará de reunir toda la información proporcionada por los sensores radar e integrarlas con los datos facilitados por el AIS, el sistema de emergencia Llamada Selectiva Digital (DSC, siglas en inglés), así como las estaciones meteorológicas e hidrológicas.
Tendrá también acceso a varias cámaras que serán instaladas para comprobar visualmente la información reunida por el resto de sensores.
Informes de las agencias antidrogas de Estados Unidos, a los que tuvo acceso EL HERALDO, revelan que los pagos por llevar cargamentos de estupefacientes en alta mar son jugoso.
Toda la tripulación recibe una parte de los pagos, incluso tienen embarcaciones de abastecimiento.
El dinero lo recibe desde el capitán, que es el responsable de la droga, hasta los ayudantes que se aseguran que no se vaya a dañar, pero de ser capturados, les cae todo el peso de la ley.
Pesqueros
Los barcos pesqueros también son pieza importante en el narcotráfico, no solo por llevar droga, sino porque son los que se encargan de abastecer de combustible a las embarcaciones donde va el cargamento.
EL HERALDO reveló recientemente que el centro de monitoreo de embarcaciones de la Dirección General de Pesca y Acuicultura (Digepesca) de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) estaba infiltrado por el narcotráfico.
En ese sentido, desde el mes anterior se comenzaron a tomar fuertes medidas para ejercer más control de las áreas pesqueras de Honduras y evitar que las drogas pasen con facilidad.
Se estima que 420 millones de contenedores circular por el mar anualmente, es decir, el 90 por ciento de la carga mundial.
En los puertos de Honduras atracan alrededor de 1,500 contenedores al año, donde en varias operaciones de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (Dlcn) han encontrado droga o sustancias para elaborarla.
No obstante, las lanchas rápidas son el medio de transporte predilecto y ahora las que lleguen a Honduras podrán ser identificadas por la Marina.
“Nosotros tenemos presupuestado y aprobado la colocación de los VTS”, afirmó a EL HERALDO Juan Carlos Rivera, titular de la DGMM.
“Vamos a tener un radio de cobertura que va a permitir cubrir las aguas interiores de Honduras y todo el mar territorial”, precisó Rivera.
El sistema permitirá tener una pared, que generará una alarma y cada vez que entre una embarcación al territorio hondureño, la Marina estará en la capacidad de detectarla.
Es posible que ahí no esté la Fuerza Naval de Honduras (FNH), pero se hará de inmediato los análisis de la legalidad de la embarcación y allí se informará a las autoridades operativas y se aplicará los convenios de cooperación.
El proyecto ya está aprobado, se comenzará con el proceso de la selección de empresas y se espera que a finales de este año se eche a andar, para la seguridad de Honduras.
En la actualidad, el mar está desprotegido pues los radares que tiene Honduras solo son para controlar el tráfico aéreo.
Mientras que en el mar solo se cuenta con los radares que tienen las embarcaciones de la Fuerza Naval de Honduras (FNA).
Quienes hacen mayor detección y persecuciones en caliente son los cuerpos armados del Comando Sur de Estados Unidos.
Pero también se está haciendo trabajos de coordinación con otros países para identificar embarcaciones ilícitas como algunas que navegan cerca de las Islas del Cisne, confirmaron las autoridades hondureñas a EL HERALDO.
Para Rivera, Honduras puede tener cinco Naves Patrulleras Oceánicas (OPV), pero de nada sirve si no identifica los objetivos a perseguir y en eso se está trabajando.
Para el gobierno de Honduras, el narcotráfico está volviendo a ser una preocupación, sobre todo por los reclamos de Estados Unidos de la llegada de cargamentos y aumento de vuelos ilícitos al departamento de Gracias a Dios
