La Policía del estado de Minnesota, EE.UU., detuvo a Nicholas Wig, un joven de 26 años de edad que había irrumpido el pasado 19 de junio en una casa privada en la ciudad de South St. Paul.
Según informa la cadena CBS, la tarea no ha sido muy difícil. Wig no se limitó a robar las tarjetas de crédito, efectivo y relojes que había descubierto en el lugar, sino también ropa y botas.
Dejó sus prendas, mojadas, directamente en el suelo. Pero esto no es todo: usó el ordenador de la casa para chequear su perfil de Facebook y olvidó cerrar la sesión antes de irse, un olvido que le condenó y facilitó su captura.
Ahora el despistado ladrón puede enfrentarse a una condena de hasta 10 años en la cárcel.