TEGUCIGALPA
“Excesivo”, “caro”, “desconsiderado” y hasta “sospechoso” son algunos calificativos emitidos por los ciudadanos al referirse a los 400 lempiras que deberán pagar por las evaluaciones médicas que exige la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte para la emisión de licencias de conducir.
Una consulta de EL HERALDO evidenció el malestar de las personas por el precio establecido, asimismo la desconfianza del nuevo proceso evaluativo.
Según los entrevistados, el monto estipulado por las autoridades eleva hasta en un 100% el gasto que se podría realizar en una clínica particular por un examen visual, auditivo o psicológico.
Aunque la organización mostró el “equipo de punta” con el que trabajará, los futuros conductores creen que todo podría tratarse de un nuevo negocio que generará cuantiosas ganancias.
Sin embargo, la Cruz Roja Hondureña, entidad a cargo de los exámenes, aclaró que los fondos que recolecten servirán para desarrollar diversos proyectos sociales.
Por su parte, dueños y empleados de consultorios aledaños a la antigua sede de Tránsito cuestionaron que se ponga en duda los servicios que ofrecen y “que por unos paguen todos”
