Motores

Diésel o gasolina, ¿cuál es mejor?

En Honduras, las ventas promedio de los vehículos con motor diesel representan el 65% del total. Entre costos y mantenimiento le mostramos lo que necesita conocer para elegir entre ambas motorizaciones.

FOTOGALERÍA
11.05.2017

Tegucigalpa, Honduras
Dejando al margen la diferencia actual entre el precio de los carburantes, los costos de mantenimiento preventivo y desgaste asociado a cada propulsor (diésel o gasolina) son claves para su elección y óptimo rendimiento.

Cambios de aceite y filtros

De acuerdo con Jesús Álvarez, jefe de taller Toyoservicios, aunque existen similitudes entre el mantenimiento que se realiza en ambos motores (aceite y filtro son los más frecuentes), las principales diferencias se centran en la sustitución del filtro de combustible.

En el caso de los diésel, se debe realizar cada 20 mil kilómetros recorridos, mientras que en los propulsores de gasolina este filtro es casi secundario (80 mil kilometros).

En diésel, la sustitución de este elemento es vital para su óptimo funcionamiento dado que los sistemas de inyección directa a alta presión, así como las bombas de inyección, son elementos de alta precisión mecánica y, por tanto, generan un coste muy elevado de reparación o sustitución (entre 20 a 30 mil lempiras).

De igual forma se debe verificar en cada revisión el estado de las bujías (cada 20 mil km en las convencionales) ya que son los encargados de precalentar el combustible, procurando un correcto arranque del motor. Una bujía con residuos de carbón o impurezas adheridas indica posibles fugas de aceite o que se está utilizando un combustible de mala calidad.

Pese a que es más barato y con mayor rendimiento, el diésel es el combustible más contaminante y con mayor suciedad.

Realice cada 5,000 km un revisión preventiva de su vehículo y evite sobrecostos de reparación.

Economía y medio ambiente

Los motores diésel son más eficientes. Su comercialización actual cuesta más, pero consume menos que los de motor de gasolina. Por otro lado, la actual generación de los motores diésel se ha ido equiparando en potencia y rendimiento. Un punto que le juega en contra a las motorizaciones diésel es el grado de contaminación.

En relación con los de gasolina, tienen la ventaja de que emiten menos CO2, que calienta la atmósfera y produce el efecto invernadero. Pero, en cambio, sueltan más partículas y más óxido de nitrógeno, ambos nocivos para el ser humano.

A diferencia de los motores gasolina, en los diésel las válvulas de recirculación de gases de escape (EGR) requieren mayor cuidado. Si estas terminan por llenarse de carbonilla inhiben el mal funcionamiento del motor. Su revisión debe hacerse cada 100,000 kilómetros.