El asesinato de Óscar Roberto Ramírez,
hijo del exdirector de la Policía Nacional, Ricardo Ramírez del Cid, habría sido planificado desde el interior de la Penitenciaría Nacional por tres reclusos.
Ramírez, de 17 años, fue ejecutado junto a dos policías del Comando de Operaciones Especiales (Cobras), Abrahán Gúnera, de 30 años, y Carlos Armando Lira Turcios, de 29 años, quienes estaban asignados a su seguridad.
El hecho criminal se registró el pasado domingo mientras las tres víctimas compraban comida en un negocio de la colonia Altos de Toncontín.
Unas horas antes el joven había participado en un encuentro deportivo con sus amigos en unas canchas de fútbol ubicadas entre la colonia América y Las Hadas. Según el reporte de elementos policiales, las tres personas fueron atacadas cuando supuestos pandilleros ingresaron al local a cometer un aparente asalto.
Uno de los guardaespaldas de Ramírez perdió la vida al instante y seis personas resultaron heridas, entre ellas dos empleadas del negocio, el hijo de Ramírez del Cid y el otro guardaespaldas; estos dos últimos fallecieron minutos más tarde en el hospital Escuela.
En el centro hospitalario también falleció otro hombre.
Ayer trascendió la versión de que la noche del incidente fue ingresado gravemente herido un menor de edad al centro asistencial y permanece hospitalizado bajo fuertes medidas de seguridad, ya que se investiga si habría tenido participación en el atentado. En otra versión se supo que los hospitalizados serían dos y que uno de ellos habría confesado el ataque..
Versión
EL HERALDO tuvo acceso a datos que indican que en la muerte del joven Ramírez estarían involucradas tres personas que permanecen recluidas en el interior de la Penitenciaría Nacional.
Otra fuente ligada a los cuerpos de inteligencia confirmó que ahora las diligencias se han extendido hasta la Penitenciaría Nacional, en base a la información que se maneja sobre la participación de los presidiarios en la planificación y ejecución del hecho criminal.
Sin embargo, el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Héctor Iván Mejía, dijo que hay varias teorías que se tejen en torno al hecho criminal.
A Mejía se le preguntó si se había confirmado que la cuarta persona fallecida era parte del grupo de criminales y respondió que “aparentemente es miembro de una pandilla, hay algunos datos ahí importantes de reconocer en su historial y desde ahí está el punto de partida para estructurar bien el grupo que integra y cuáles son las formas de operar y los lugares y en qué otras operaciones han trabajado”.
Pandilleros
Hay que descartar que tras el lamentable hecho criminal, tanto la viceministra de Seguridad, Coralia Rivera, como el exdirector de Centros Penales, Danilo Orellana afirmaron que el hecho había sido cometido por pandilleros.
La versión fue dada ya que circuló la versión de que el sangriento ataque habría sido cometido por algún sector al interior de la institución policial.