En marzo de 2019, María Daysi Castillo Cruz ingresó a un hospital público para visitar a su sobrino, interno por problemas renales, según informes de las autoridades.
Minutos después lo llevó al baño y 'colocó en la lengua del afectado una pastilla de curar frijoles'.
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De inmediato, el niño, por el mal sabor de la pastilla, la expulsó y la botó. Minutos después llegó su madre y observó que el pequeño vomitaba una extraña sustancia negra. Al consultarle qué le pasaba le dijo que le había hecho daño lo que le dio su tía.
Rápidamente la progenitora solicitó ayuda al personal médico, quienes afortunadamente lograron salvarle la vida al menor.
Los Fiscales de la Sección de Investigación de Muertes de Menores de la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) lograron en audiencia de juicio oral y público una condena contra la imputada, quien tendrá que comparecer a la audiencia de individualización de la pena el próximo 8 de marzo.
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