Sucesos

Dejaron libre al presunto narcotraficante hondureño Wilter Blanco

En un operativo entre Colón y Atlántida fue detenido en septiembre, pero misteriosamente se le dejó en libertad

12.10.2016

Tegucigalpa, Honduras
La que sigue es casi una transcripción literal de una conversación telefónica.

- ¡Amiga!
- Dime, amiga.
- ¡Te tengo buenas
noticias!
- Ajá...
- Cincuenta nada más te pude conseguir...
- Ahhhh, ok... Perfecto...
- Amiga, mire, yo le voy a dar un consejo... no malgaste su pisto...
- No, no, no... personal, personal, hablemos esto te digo... te voy a marcar de otro número. ¿Y qué hay...?

Es una conversación telefónica entre una supuesta emisaria del presunto capo de la droga Wilter Neptaly Blanco Ruiz con una persona operadora de la justicia del sector atlántico del país para agradecerle los favores que le ha hecho en sus operaciones de narcotráfico, blanqueo de dinero y protección.

La conversación realizada en algún momento de este año forma parte de un repertorio de pláticas telefónicas que el supuesto capo ha mantenido -ya sea directamente o con intermediarios- con fiscales, policías y contactos militares, y que están en poder de los cuerpos de inteligencia del país.

Wilter Blanco es un viejo conocido del gobierno de Estados Unidos y de las agencias de investigación antidrogas, que ya han solicitado a Honduras su extradición por estar vinculado supuestamente con el trasiego de decenas de toneladas de cocaína hacia aquel país.

Wilter logró integrar una completa red de transportistas de droga, conformada por una estructura de diferentes ramas que van desde su propia banda logística, fiscales, policías de alto y bajo grado hasta oficiales de las Fuerzas Armadas.

Informaciones en poder de EL HERALDO dan cuenta de lo escurridizo que ha sido porque ha tenido a su disposición una red de información al tener infiltradas varias instituciones operadoras de justicia e investigación.

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Pero Wilter también es un viejo conocido de las instituciones operadoras de justicia del país. En 2015, más por presiones del gobierno de Estados Unidos, se procedió a asegurarle millonarios bienes localizados en Atlántida, Colón y Cortés.

Sin embargo, ha mantenido también contactos a través de una estructura que le suministra anticipadamente información sobre operaciones antidrogas, movimientos de los instrumentos de navegación aérea o de aquellos operativos que buscan su captura.

Wilter Blanco, de acuerdo con las investigaciones de los cuerpos de inteligencia, ha operado en el sector de La Mosquitia, Colón, Atlántida e Islas de la Bahía.

Este personaje, además, es mencionado en un reporte interno de la propia policía por ordenar, junto con oficiales de la policía, el crimen del entonces zar antidrogas Julián Arístides González.

Ordenó atentados
EL HERALDO tuvo conocimiento de que el supuesto capo se ha visto asediado por los cuerpos antidrogas de Estados Unidos y que ha visto en su embajador, James Nealon, a una de las personas más incisivas en la lucha contra los carteles.

Estados Unidos logró captar conversaciones telefónicas a mediados de agosto de este año del supuesto capo con sus compinches en las que hablan de dar de baja y actuar contra el embajador Nealon y el presidente de la República, Juan Orlando Hernández.

Estas conversaciones provocaron que se elevara el nivel de seguridad del embajador y se notificara a la contraparte hondureña.

La contraparte hondureña, aparentemente, ya tenía conocimiento de estas amenazas y aunque no les restó importancia consideró que no eran más que rabietas y dichos de un hombre molesto porque le estaban pisando los talones.

El compromiso fue reforzar la seguridad y, además, desatar una cacería para dar con su captura disponiendo de todos los recursos necesarios. El supuesto capo es considerado una persona altamente peligrosa.

Embajada molesta
Informes obtenidos por EL HERALDO revelan que hay un malestar en la embajada de Estados Unidos por la conducta observada en algunos operadores a las que no se les ha visto ni efectividad ni celeridad en algunas decisiones.

Es más, algunas acciones y decisiones han atraído muchas sospechas, por lo que en respuesta la nueva política de EE UU es enviar comunicados mencionando e identificando a personas que son sujetas a sus propias investigaciones.

Esta política siempre ha sido contraria a esa representación diplomática y, cuando los periodistas acudían para solicitar información concreta, siempre salían al paso diciendo que no se pronunciaban sobre casos particulares.

Pero ¿qué ha hecho cambiar a la Embajada? ¿Por qué este giro? ¿Qué hay detrás de estos comunicados? ¿Para quién o quiénes está dirigido el mensaje? Las respuestas están en el aire, lo que sí supo EL HERALDO es que hay malestar en algunas agencias del gobierno de Estados Unidos por la conducta observada en algunos operadores de Honduras.

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EL HERALDO tuvo conocimiento de que dos o tres días después de la captura del hijo de uno de los Valle, a inicios del mes anterior, se montó un operativo en Atlántida y Colón porque había indicios del movimiento del supuesto capo Wilter Blanco.

Producto de esta acción fue detenido por unos agentes en Tela o en un sector de Colón, la fuente no fue muy precisa al momento de identificar el lugar.

Los agentes le quitaron la documentación, incluidos unos pasaportes y otros documentos, pero sorpresiva y misteriosamente fue dejado en libertad.

De acuerdo con lo que supo EL HERALDO, este hecho fue posteriormente conocido por las agencias antidrogas de Estados Unidos, que inmediatamente urgieron varios encuentros con los operadores de Tegucigalpa.

En las reuniones participaron varios representantes de los operadores de justicia e inteligencia del Estado y miembros de las agencias antidrogas de EE UU. No fueron reuniones amables.

EE UU demandó que mostraran los documentos retenidos a Wilter y una explicación de por qué no había sido capturado. Las autoridades hondureñas salieron con argumentos infantiles y pobres, y la explicación que dieron es que el agente que lo detuvo era novato y no estaba seguro si se trataba del supuesto capo, según supo EL HERALDO.

Los representantes de EE UU salieron molestos por las respuestas.

Desde entonces la embajada cambió de estrategia y procedió a publicar comunicados con nombres de los supuestos miembros de la red de narcotráfico y corrupción en los que salen implicados militares y civiles de la red de Blanco.

Fuentes de confianza dijeron que pronto saldrán más nombres de más oficiales y de otros operadores de justicia vinculados con esta y otras redes.

Las dudas persisten sobre las razones por las que uno de los hombres más buscados y por quien se había montados varios operativos en meses anteriores no fue capturado, y más bien fue dejado en libertad.

¿Hubo alguien que intervino? ¿es convincente la explicación de que era un oficial novato el que lo detuvo? ¿Quiénes fueron los que actuaron en la operación entre el 10 y 14 de septiembre en el litoral atlántico ¿Algún superior intervino?

El supuesto capo ha escapado a dos intentos de captura en el último año y medio, según supo EL HERALDO por fuentes de la Secretaría de Seguridad. Una vez estaba a punto de ser capturado en una isla del Caribe, pero logró escabullirse, y otra vez en Colón, donde también huyó, recordaron.

Militares también
EL HERALDO supo que hace unos tres meses los cuerpos de seguridad de Honduras fueron alertados de que había oficiales de las Fuerzas Armadas asignados en la Fuerza de Tarea Conjunta Policarpo Paz García, asentada en La Mosquitia, involucrados en actividades de narcotráfico y corrupción.

Hay al menos cinco oficiales de las Fuerzas Armadas investigados por Estados Unidos, dos de ellos coroneles, dos capitanes y otro cuyo grado no fue precisado.

EL HERALDO tuvo acceso a un reporte de inteligencia en el que se subraya que “tenemos conocimiento que un coronel de la Fuerza Aérea Hondureña posiblemente identificado como (omitimos el nombre) puede estar implicado con proveerle información a narcotraficantes”.

Informes en poder de
EL HERALDO establecen que el supuesto capo mantuvo conversaciones en agosto de 2016 con sus compinches para atentar contra el embajador de EE UU y el presidente
de la República.

Este mismo reporte establece que el capitán Santos Orlando Rodríguez Orellana, de quien la embajada de Estados Unidos, en un comunicado emitido el lunes pasado, asegura que está siendo investigado, tiene vínculos con Evin Xavier Peña y Óscar Aarón.

Estas dos personas, a juicio de Estados Unidos, están vinculadas con el narcotráfico, según el comunicado emitido el viernes pasado. El segundo es señalado como el jefe de la banda Los Pelones.

Rodríguez Orellana estaba asignado en La Mosquitia y tenía conocimiento de un sistema de detección que puede alertar al operador de un radar sobre cualquier movimiento en Gracias a Dios. De acuerdo con reportes de inteligencia a los que EL HERALDO tuvo acceso, Rodríguez Orellana y un teniente planearon colaborar con un cargamento de drogas.

Este capitán y también su compañero, capitán Carlos Maradiaga, están señalados de coordinar para el aterrizaje de tres vuelos con cargamento de cocaína entre el 7 y 15 de agosto de este año, según este reporte al que se ha tenido acceso.

Igual se precisa que a finales de julio uno de estos oficiales activó probablemente un equipo radar después de que un cargamento de drogas salió de Venezuela.



La vivienda
Otro de los puntos que es evaluado en los reportes de inteligencia es el hallazgo en una comunidad de Colón, fronterizo con Gracias a Dios, de una vivienda presumiblemente utilizada como refugio de Wilter Blanco.

La vivienda, metida en la selva, de aspecto endeble y alicaída, tenía en su interior una habitación con mucha comodidad que contrastaba con el inmueble, y en las indagaciones se dieron cuenta que era uno de los refugios de descanso del supuesto capo.

Cuando los militares pretendieron asegurar el inmueble, este aparecía a nombre de una persona de la comunidad. Se pidió el apoyo de la Fiscalía de la zona y tras un intercambio de información entre operadores de justicia se declinó hacer el aseguramiento.

No había razones para hacerlo. Y todos coincidieron en que jurídicamente no procedía, dijo la fuente. Pero alguien mandó versiones diferentes que llegaron a oídos del presunto capo y de su gente.

Días después, una persona que forma parte de los operadores de justicia del litoral atlántico, y que justificó que no procedía el aseguramiento, recibió una llamada telefónica.
- ¡Amiga!
- Dime, amiga.
- ¡Te tengo buenas
noticias!
- Ajá...
- Cincuenta nada más te pude conseguir...
- Ahhhh, ok... Perfecto...
- Amiga, mire, yo le voy a dar un consejo... no malgaste su pisto...
- No, no, no... personal, personal, hablemos esto te digo... te voy a llamar de otro número. ¿Y qué hay?
- No, no, no, solo... Alguien te lo va a ir a dejar. Usted tiene que decir la hora y adónde.
- Ok.

Fuentes de EE UU: Sin comentarios

EL HERALDO hizo varias consultas con fuentes de la embajada de Estados Unidos. Las que siguen son las preguntas y las respuestas.

-EL HERALDO: La información que tenemos es que entre el 10 y 12 de septiembre, en algún sector de Tela o Colón, fue detenido el supuesto capo Wilter Blanco, pero las personas hondureñas que lo detuvieron lo dejaron en libertad, solo le requirieron documentos. Nos gustaría tener algunos comentarios sobre este punto.
FUENTE: No podemos confirmar esta información. Sin comentarios.

-EL HERALDO: Sabemos que hubo reuniones de gente de EE UU con la de Honduras, que expresaron su malestar e indignación por este hecho y solicitaron algunas explicaciones. Nos gustaría tener algunos comentarios sobre este punto.

FUENTE: No podemos confirmar esta información. Sin comentarios.

-EL HERALDO: Tenemos información de que agencias antidrogas de EE UU lograron tener acceso a conversaciones en las que Wilter Blanco fijaba como objetivo de ataque al embajador James Nealon y al presidente Hernández. Nos gustaría tener algunos comentarios sobre este punto.

FUENTE: No podemos confirmar esta información. Sin comentarios.

-EL HERALDO: Las agencias antidrogas, al tener información sobre estas amenazas, las comunicaron a la contraparte de Honduras, que aparentemente les restó importancia y asumió que eran una rabieta del supuesto capo. Nos gustaría tener algunos comentarios sobre este punto.

FUENTE: No podemos confirmar esta información. Sin comentarios.

-EL HERALDO: Tenemos información de que al menos hay dos oficiales con grado de coroneles, de apellidos Girón y Baltodano, que están siendo también investigados por narcotráfico y corrupción. Nos gustaría tener algunos comentarios sobre este punto.

FUENTE: Los Estados Unidos espera que las autoridades hondureñas estarán investigando a todos los involucrados en narcotráfico y corrupción.

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