Tegucigalpa, Honduras
El cine producido en nuestros países centroamericanos ha dejado de ser una incógnita para los investigadores y los académicos de otras latitudes; y es que, hasta hace unos años, incluso dentro de nuestras fronteras no conocíamos de las iniciativas y proyectos realizados por nuestro países vecinos. Actualmente, el cine en la región está teniendo un crecimiento significativo en cantidad y calidad, tanto que, al proponer un Primer Congreso Internacional de Cine Centroamericano, la Universidad de Costa Rica ha convocado a más de 60 especialistas en cine de alrededor del mundo, interesados en exponer sus estudios e inquietudes sobre el cine que está creciendo en nuestros países, y con ello, ampliando la idea y las geografías de lo que llamamos: el 'cine latinoamericano'.
Es evidente, claramente, una necesidad imperante de reunirnos periódicamente para teorizar y 'sentarnos a pensar' nuestro Cine Centroamericano. Esta primera experiencia de mesas de trabajo, donde por un lapso de tres días completos se debatió, comentó y develó parte de los logros y las estrategias que los creadores en los países centroamericanos estamos utilizando para formular propuestas de cine trascendentales, desarrolló temáticas sobre el cine centroamericano que han girado entorno a la creación de películas y sus autores en los diversos géneros, pero también temas tan importantes como la necesidad de la crítica del cine en Centro América y los canales de distribución, conservación (nuestra Cinemateca Universitaria 'Enrique Ponce Garay') y la visualización de las producciones audiovisuales de nuestros países.
Las miradas que hacia nuestro cine confluyen en este encuentro, vienen de países tan variados como Argentina, Cuba, México, Suiza, Estados Unidos, Alemania y, por supuesto, de cada uno de los países de nuestra “unida por el cine” Centro América. Aquí me gustaría destacar la valiosa presencia a este primer Congreso de la investigadora del Cine Latinoamericano, Tamara Falicov de la Universidad de Kansas, la cual siempre ha estado en contacto con el cine de la región centroamericana a través de académicos y creadores. Y desde Suiza, Silvia Rosa, cuya investigación versaba específicamente sobre el cine de animación en Centro América, apoyándose fuertemente en el trabajo de tres hondureños destacados en este campo: Omar Carías, Adrián Guerra y Michael Baruch.
Es de especial mención para Honduras, que la delegación catracha en este congreso fue una de la más activas y numerosas, el grupo fue conformado por Ana Martins, Hispano Durón, Julia Herrera, Laura Bermúdez, Servio Tulio Mateo, Violeta Mora y, quien les escribe, Darwin Mendoza, delegación acompañada gustosamente por nuestro Embajador en Costa Rica, Sr. Juan Alberto Lara Bueso y el Sr. Mauricio Ortiz, tataranieto de nuestro general Francisco Morazán, en esta experiencia que une la pasión por el cine en la región. Este Primer Congreso, tuvo presencia académica hondureña de la UNAH y de la UPI, clausurando con el estreno de la película “Morazán”, producida por la FUNDAUPN este año en nuestro país.
La gran relevancia de este tipo de actividades académicas de primer nivel, radica en que nuestro cine está teniendo muchas cosas que decir y ya es obligatorio analizar, teorizar y publicar, en mayor medida, sobre los aportes del cine centroamericano a la evolución del cine mundial. Camila Cabrera Rodríguez, especialista investigadora que nos visitó de Casa de las Américas, (Cuba) me comentaba que el primer congreso sobre Cine Centroamericano “puede sentar las bases para la continuidad de este tipo de reflexiones, tanto en el ámbito centroamericano, como fuera de estos espacios” y que “se está pensando en Centro América y su cine en relación también con otras disciplinas y de otros ámbitos que no son los puramente implicados en la temática del cine con tal.”
Es ineludible destacar que el cine en Centro América está, hoy por hoy, en una etapa de pleno desarrollo, sentimos que ya despertó y que debemos acompañarlo en su sano crecimiento con eficientes esfuerzos, para que a través del cine, sigamos creando la historia y con todo ello, reforzando y creando memoria, así como sugiriendo vías de acción de cambio social, político y humano en nuestros países.
A los creadores, este tipo de confluencias nos ayudarán a visualizar nuestro cine, pero más importante, a visualizar las claves y motivarnos a buscar nuevos y renovados recursos para hacer un, cada vez mejor, cine en la región central de nuestra América.
El cine producido en nuestros países centroamericanos ha dejado de ser una incógnita para los investigadores y los académicos de otras latitudes; y es que, hasta hace unos años, incluso dentro de nuestras fronteras no conocíamos de las iniciativas y proyectos realizados por nuestro países vecinos. Actualmente, el cine en la región está teniendo un crecimiento significativo en cantidad y calidad, tanto que, al proponer un Primer Congreso Internacional de Cine Centroamericano, la Universidad de Costa Rica ha convocado a más de 60 especialistas en cine de alrededor del mundo, interesados en exponer sus estudios e inquietudes sobre el cine que está creciendo en nuestros países, y con ello, ampliando la idea y las geografías de lo que llamamos: el 'cine latinoamericano'.
Es evidente, claramente, una necesidad imperante de reunirnos periódicamente para teorizar y 'sentarnos a pensar' nuestro Cine Centroamericano. Esta primera experiencia de mesas de trabajo, donde por un lapso de tres días completos se debatió, comentó y develó parte de los logros y las estrategias que los creadores en los países centroamericanos estamos utilizando para formular propuestas de cine trascendentales, desarrolló temáticas sobre el cine centroamericano que han girado entorno a la creación de películas y sus autores en los diversos géneros, pero también temas tan importantes como la necesidad de la crítica del cine en Centro América y los canales de distribución, conservación (nuestra Cinemateca Universitaria 'Enrique Ponce Garay') y la visualización de las producciones audiovisuales de nuestros países.
Las miradas que hacia nuestro cine confluyen en este encuentro, vienen de países tan variados como Argentina, Cuba, México, Suiza, Estados Unidos, Alemania y, por supuesto, de cada uno de los países de nuestra “unida por el cine” Centro América. Aquí me gustaría destacar la valiosa presencia a este primer Congreso de la investigadora del Cine Latinoamericano, Tamara Falicov de la Universidad de Kansas, la cual siempre ha estado en contacto con el cine de la región centroamericana a través de académicos y creadores. Y desde Suiza, Silvia Rosa, cuya investigación versaba específicamente sobre el cine de animación en Centro América, apoyándose fuertemente en el trabajo de tres hondureños destacados en este campo: Omar Carías, Adrián Guerra y Michael Baruch.
Es de especial mención para Honduras, que la delegación catracha en este congreso fue una de la más activas y numerosas, el grupo fue conformado por Ana Martins, Hispano Durón, Julia Herrera, Laura Bermúdez, Servio Tulio Mateo, Violeta Mora y, quien les escribe, Darwin Mendoza, delegación acompañada gustosamente por nuestro Embajador en Costa Rica, Sr. Juan Alberto Lara Bueso y el Sr. Mauricio Ortiz, tataranieto de nuestro general Francisco Morazán, en esta experiencia que une la pasión por el cine en la región. Este Primer Congreso, tuvo presencia académica hondureña de la UNAH y de la UPI, clausurando con el estreno de la película “Morazán”, producida por la FUNDAUPN este año en nuestro país.
La gran relevancia de este tipo de actividades académicas de primer nivel, radica en que nuestro cine está teniendo muchas cosas que decir y ya es obligatorio analizar, teorizar y publicar, en mayor medida, sobre los aportes del cine centroamericano a la evolución del cine mundial. Camila Cabrera Rodríguez, especialista investigadora que nos visitó de Casa de las Américas, (Cuba) me comentaba que el primer congreso sobre Cine Centroamericano “puede sentar las bases para la continuidad de este tipo de reflexiones, tanto en el ámbito centroamericano, como fuera de estos espacios” y que “se está pensando en Centro América y su cine en relación también con otras disciplinas y de otros ámbitos que no son los puramente implicados en la temática del cine con tal.”
Es ineludible destacar que el cine en Centro América está, hoy por hoy, en una etapa de pleno desarrollo, sentimos que ya despertó y que debemos acompañarlo en su sano crecimiento con eficientes esfuerzos, para que a través del cine, sigamos creando la historia y con todo ello, reforzando y creando memoria, así como sugiriendo vías de acción de cambio social, político y humano en nuestros países.
A los creadores, este tipo de confluencias nos ayudarán a visualizar nuestro cine, pero más importante, a visualizar las claves y motivarnos a buscar nuevos y renovados recursos para hacer un, cada vez mejor, cine en la región central de nuestra América.
