Honduras

Raúl Pineda: Hay intereses creados y agendas ocultas sobre ley electoral

Parece que no les preocupa a los políticos llevar al país a una nueva crisis, sostienen el analista político

12.09.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La postergación en la aprobación de la nueva Ley Electoral por desacuerdos políticos tiene al país sumergido en la incertidumbre y desconfianza de un nuevo proceso electoral. Raúl Pineda, analista político, habló con EL HERALDO sobre las consecuencias de no tomar decisiones en beneficio de los hondureños.

¿Cómo ve los desacuerdos entre fuerzas políticas por la nueva Ley Electoral?

El país necesita una transformación política con reformas profundas, el primer paso es una nueva Ley Electoral, lamentablemente hay interés creado, agendas ocultas que orbitan alrededor del afán de los que están en el poder para no dejarlo y de los que quieren llegar a toda costa, se dan alianzas coyunturales entre los sectores oscuros de los diferentes partidos desde el inicio hay indicios que no se quiere un proceso electoral transparente.

¿Tiene futuro la aprobación de la nueva ley?

La aprobación de la nueva ley es aleatoria, difícil que se apruebe, están pensando en su situación personal en lugar que un país reinvente su democracia.

¿Cuál sería la salida a corto plazo?

La salida es reformar la actual Ley Electoral en los temas que son el núcleo duro de la discusión, la representación en las mesas, estos partidos nuevos son ramas de los partidos tradicionales, en esta elección no va haber tráfico de credenciales, pero sí de representantes.

¿Hay preocupación por lo que pasó en el 2017?

Honduras ya vivió una crisis en 2017, pero parece que no les preocupa esa situación así como el impacto en la seguridad jurídica, la inversión extranjera reducida a un 50% y camino a un abismo y no surge nadie que quiera apartarnos.

¿Influye la nueva ley en las elecciones primarias?

Si se convoca a las elecciones internas con la nueva o vieja ley es irrelevante, lo que es vergonzoso es que el Consejo Electoral que maneja legitimidad y que su fortaleza es la unidad, lo que tenemos no es un árbitro si no tres representantes de partidos que están a punto de realizar un festival caníbal que se va a reflejar en las bases de los partidos, estamos en una campaña de odio y no propuestas.