TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) trabaja de forma permanente en Honduras para mejorar diferentes indicativos del desarrollo.
La directora de la Oficina Multipaís de la UNESCO, con sede en San José de Costa Rica, Esther Kuisch Laroche, visitó el país y sostuvo reuniones con diferentes sectores.
La representante de la entidad para Centroamérica y el Caribe indicó que se debe reformar el sistema educativo hondureño. Ella conversó en exclusiva con EL HERALDO sobre diferentes temas. A continuación lo que dijo.
¿Cuál es el objetivo de su visita a Honduras?
Llegué primero a Gracias, Lempira, para un Congreso sobre la reserva de biósferas y luego en la capital para tener reuniones con las diferentes entidades de gobierno, los diferentes ministerios para ampliar la cooperación entre la UNESCO y Honduras.
¿En qué aspectos está apoyando la UNESCO al país?
Trabajamos en las áreas de educación, cultura, ciencias y también en el tema de la libertad de expresión y el acceso a la información. En el tema de cultura tratamos sobre el patrimonio mundial, el patrimonio intangible, la creatividad y cómo impulsar las industrias creativas. Nosotros también acompañamos a la Secretaría de Educación en términos de revisar sus políticas, estrategias, dar un apoyo técnico y dar recomendaciones.
En el ámbito educativo, ¿qué aspectos están abordando actualmente?
Hemos hecho una revisión de las políticas educativas con una serie de recomendaciones, entonces vamos a ver cómo ayudar al gobierno para implementar las recomendaciones.
¿Qué tipo de recomendaciones hicieron?
Una que es interesante es sobre el uso de las tecnologías de la información (TIC). Otra es cómo fortalecer y mejorar los programas de educación técnica y profesional, entre otras.
¿Cuáles son los retos en materia educativa que tiene que superar el país?
Un gran reto que hay no solo en Honduras, sino un fenómeno en toda la región, es la deserción de jóvenes de los centros educativos. Hay muchos jóvenes que abandonan la educación en la secundaria y eso es un problema porque luego no encuentran trabajo y son más vulnerables para caer en violencia. También está muy vinculado con el tema de inmigración.
¿Qué se puede hacer para frenar la deserción?
Lo que queremos hacer es ver cómo podemos ayudar a esos jóvenes que están fuera del sistema formal y cómo apoyarles para que puedan tener un aprendizaje a través de la educación informal o educación técnico-profesional para que puedan encontrar un empleo y puedan tener oportunidades aquí en Honduras.
¿Qué implica que un promedio anual de más de 80 mil alumnos estén desertando?
Este es un fenómeno de toda Centroamérica y más allá, es preocupante porque el tema del desempleo de los jóvenes es muy importante para nosotros, tenemos que ver cómo volvemos nuestros sistemas educativos más flexibles para que puedan reincorporarse y que aprendan para poder encontrar un trabajo.
¿Preocupa los altos índices de reprobación y repitencia que al año han superado los 90 mil casos?
Sí, nuestro enfoque es cómo podemos apoyar a los ministerios de Educación para mejorar la calidad educativa, que sea pertinente, que los jóvenes aprendan las habilidades que necesiten para funcionar en este siglo XXI y puedan encontrar un trabajo digno.
¿Cómo se puede mejorar la calidad educativa?
Tiene que ver con la formación de los profesores, que el currículo sea pertinente, con las metodologías de enseñanza y nosotros estamos trabajando en todos estos temas.
¿Cómo se debe trabajar en la formación de docentes?
No solamente hacer una formación de inicio y luego abandonar a los maestros y maestras, es una profesión muy difícil y muchas veces trabajan en condiciones complicadas, por lo que es importante tener una formación continua para acompañarles y ayudarles a mejorar sus metodologías y saber cómo hacerle frente a los desafíos que ellos se enfrentan a diario.
¿Se deben actualizar los currículos de enseñanza?
Claro, y no solo en Honduras, el mundo está cambiando mucho y las tecnologías cambian rápidamente, tenemos que preparar a los jóvenes para el mundo del mañana. No podemos seguir enseñando a los jóvenes como se hacía hace 30 o 50 años, hay muchas profesiones que van a desaparecer por la inteligencia artificial.
¿Qué consejos le daría a las autoridades educativas?
El mayor reto que tenemos es cambiar un sistema educativo porque involucra mucho personal, no es nada fácil, pero en la UNESCO estamos para apoyar.
¿Qué proyectos tienen para este 2020?
Vamos a impulsar las industrias creativas, en Honduras hay mucha creatividad para generar empleo para jóvenes. También en el tema de cambio climático y la conservación de las cuatro reservas de las biósferas de la UNESCO donde buscamos un equilibrio entre la naturaleza y la actividad humana.
