Honduras

'El Chapo” Guzmán tuvo centro de operaciones en Honduras  

Mientras “El Chapo” huía de la justicia y se refugiaba en Honduras, conoció a los hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso Valle Valle, cabecillas del cartel de los Valle Valle

19.07.2019

Tegucigalpa, Honduras.- La relación del narcotraficante Joaquín Archivaldo “El Chapo” Guzmán Loera con Honduras se remonta a inicios de este siglo, tras su primera fuga del penal de Puente Grande, Jalisco, México, en enero de 2001.

El mexicano acostumbró a buscar refugio en haciendas del sector occidental del país, zona fronterizas con Guatemala, para esconderse de la persecución montada por las autoridades mexicanas y estadounidenses.

El departamento de Copán fue la localidad perfecta para que “El Chapo” se escondiera y le permitiera gozar libremente de su dinero con socios hondureños y guatemaltecos.

Aunque no existe una prueba documental de su presencia en Honduras, según reportes de inteligencia, el capo mexicano estuvo entre tres y cuatro veces en el país.

Los principales enlaces de Guzmán con narcos hondureños se lograron a inicios de este siglo y con apoyo principalmente del cartel de Los Lorenzana, el cual operó en el oriente guatemalteco, limítrofe con Honduras, y que ahora está desmembrado, cita el periódico El Universal de México.

Mientras “El Chapo” huía de la justicia y se refugiaba en Honduras, conoció a los hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso Valle Valle, cabecillas del cartel de los Valle Valle.

Los reportes de inteligencia indican que los Valle, en más de una oportunidad refugiaron a “El Chapo” en sus haciendas situadas en El Espíritu, Copán.

También invitaron a uno de los capos más mediáticos a una fiesta de cumpleaños, en donde coincidieron con otros narcos hondureños. Las investigaciones indican que Guzmán sostuvo un primer encuentro con el cartel de Los Cachiros a mediados de 2002, cuando los hermanos Rivera Maradiaga iniciaban a transportar la droga que provenía de Colombia y Venezuela.

En esa oportunidad, Guzmán Loera decidió ampliar sus operaciones en el atlántico hondureño, comenzando a traficar coca con Los Cachiros, por más de una década. Él personalmente se trasladaba a supervisar las narcopistas, narcolaboratorios y los centros de operaciones que habían instalado sus socios en el país. Los informes señalan que “El Chapo” y su estructura criminal lograron operar en Colón, Cortés, Copán, Santa Bárbara, Atlántida, Gracias a Dios y también en Olancho.

Se operó de la mano con personajes como Carlos “El Negro” Lobo; Héctor Emilio Fernández Rosa, alias “Don H”; Víctor Hugo Díaz Morales, alias “El Rojo”.

Además, traficó cientos de toneladas de cocaína con el cartel de los Montes Bobadilla y Sergio Neftalí Mejía, quien al igual que él fue sentenciado a cadena perpetua. Documentos judiciales de la Corte Federal de Nueva York indican que el mexicano pagó unos 2,500 dólares por cada kilo de cocaína que llegaba a manos de su poderoso cartel.

Los cargamentos de droga ingresaban por el mar Caribe a La Mosquitia o pistas clandestinas de aterrizaje. Los reportes afirman que Guzmán Loera vino a Honduras a conocer personalmente las rutas por donde se traficaría la droga. El mexicano fue considerado el narco más sanguinario de todos los tiempos.

Frenar la guerra
“Él vino a poner orden y a frenar la guerra entre Los Cachiros y Los Valle, los dos carteles más poderosos del país y que trabajaban no solo para ‘El Chapo’ sino para toda una estructura del Cartel de Sinaloa”, señalan fuentes policiales.

Un informe de las Fuerzas Armadas, elaborado en 2011, refiere que un alto oficial de la Policía era el conductor personal del capo mexicano, con el que se movilizaba entre la región occidental y San Pedro Sula, ciudad adonde llegó incluso a cerrar restaurantes exclusivos para departir con sus más cercanos colaboradores.

Aunque no existe una evidencia clara, “El Chapo” Guzmán tuvo una cercana relación con políticos hondureños, al grado que a varios le financió sus campañas políticas. “En el último trimestre de 2012 envió a un emisario de alto rango a Honduras, para que se reuniera con un selecto grupo de dirigentes políticos en una hacienda en el departamento de Colón.

El enviado de Guzmán Loera entregó dinero para financiar campañas electorales, pero su propósito esencial fue llegar “a poner orden” para dejar en claro las condiciones para los negocios del Cartel de Sinaloa en esta nación y su red de lavado de dinero”, relata el diario El Universal. Los partidos políticos de Honduras han negado algún nexo con “El Chapo”, quien fue sentenciado ayer a cadena perpetua más 30 años de prisión en EE UU.


Tags: