CHOLUTECA, HONDURAS. -Las enormes ganas de superarse que desde niño han caracterizado a Antonio Alexander Peralta Ochoa han sido su fuente de motivación para enfrentar cada reto nuevo.
Desde su adolescencia, el joven sureño se acostumbró a levantarse a las 3:30 de la madrugada, hora en la que comenzaba a arreglarse para luego emprender su viaje, desde su natal Namasigüe hasta la ciudad de Choluteca, donde cursaba su educación media en el Instituto Técnico Vocacional del Sur (ITVS).
Luego de mucho sacrificio obtuvo su título de media como bachiller en Administración de Empresas.
“Tener que levantarme tan temprano todos los días no era fácil, pero me daba la oportunidad de repasar mis lecciones antes de ingresar a clases”, comenta con nostalgia.
Nuevos horizontes
Pese a las responsabilidades escolares y familiares, Alexander nunca bajó sus calificaciones y siempre se mantuvo en el cuadro de honor del centro educativo, logrando un promedio estudiantil final de 92%.
Las cualidades y el buen desempeño de Peralta lo motivaron a llenar un formulario para aspirar a un programa de intercambio en el extranjero. Durante tres semanas representó al país en un programa de Estados Unidos que se llamaba Jóvenes Embajadores de Centroamérica.
“Ser electo para este programa de intercambio tocó mi vida, a esa edad apenas conocía Tegucigalpa, ya que nunca había salido de Namasigüe, logrando que ese viaje cambiara mi expectativa de vida y todos mis sueños”, relata.
Al retornar del país del norte y ya casi por egresar del colegio, Alexander se convirtió en uno de los 15 jóvenes hondureños beneficiados con la beca “Semilla” que ofrece la Embajada Americana en el país.
Estando en Estados Unidos y como parte de la beca se involucró en la Fundación Clinton, que tiene como fundadores a la expareja presidencial Bill y Hillary Clinton.
A través de la importante institución, el destacado sureño ha logrado gestionar y conseguir la donación de mochilas y útiles escolares para los niños pobres de Honduras.
A la fecha, la ayuda ha llegado a más de 800 escolares de al menos 16 comunidades del país, especialmente a aquellos de su querida Namasigüe.
Alexander regresará a su país como el nuevo representante oficial de la Fundación Clinton en Honduras, mediante la cual buscará apoyar a más jóvenes hondureños.
