El tartamudeo es un trastorno del habla en el cual el flujo normal se interrumpe mediante repeticiones frecuentes o la prolongación de sonidos, sílabas o palabras, o por la incapacidad de un individuo para comenzar una palabra. Aplicando esta definición a nuestra querida H que recién participó y volvió a casa sin pena ni gloria, vale la pena reflexionar sobre el tema, pues sin lugar a dudas es el segundo fracaso consecutivo que se obtiene en un Mundial de fútbol… es decir que la repetición del fracaso es frecuente; a diferencia del honroso papel que hizo México, Estados Unidos y no digamos el destacado logro de Costa Rica de clasificar a los cuartos de final. Esto nos indica que el fútbol del área de la Concacaf está hasta en un papel competitivo dentro del contexto mundial.
La cuestión es, ¿por qué Honduras no supera aquel honroso papel de España 82? Si en comparación a aquellos tiempos, los jugadores no tenían la infraestructura ni el capital económico millonario que acuerpó a las selecciones de Sudáfrica 2010 y Brasil 2014…
A los hondureños y hondureñas nos duele este papelón que fuimos a hacer a estos dos mundiales; por lo menos esta vez Carlo Costly nos regaló un golazo y quizás sea el jugador, al igual que el capitán Noel Valladares, que estuvo a la altura de las circunstancias. Los demás parece que necesitaban más de aquellos que ponen las gallinas para sacar la cara por Honduras, que parece que en los mundiales se vuelve tartamuda.