La crisis que golpea al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) parece no tener fin y así lo viven día a día miles de derechohabientes que se acercan a sus hospitales en busca de asistencia médica para sus dolencias, pero que, en su gran mayoría, se encuentran con el no hay... “No hay medicamentos, no hay citas, no hay especialistas”.
Como para no perder la costumbre, el lunes anterior, tras el largo feriado de la Semana Morazánica, los afiliados se encontraron con que una falla en el sistema informático les dejó sin citas, sin medicinas y sin resultados de exámenes de laboratorio, y que fueron muchos los médicos que no se presentaron a sus labores diarias.
A estos problemas, ya considerados cotidianos, se suman las renuncias de médicos especialistas en diversas áreas por la falta de pago y de materiales e insumos necesarios para trabajar, así como las denuncias de que el IHSS es una de las principales fuentes de empleo de los partidos gobernantes, entre muchas otras.
No se puede desconocer que los problemas en el sector salud se arrastran desde hace varios años y que las malas administraciones siguen pasando factura a las nuevas autoridades.
Pero también es cierto que lo hecho hasta ahora no ha sido suficiente y que los problemas más bien crecen con el paso del tiempo, en detrimento de la salud de los derechohabientes que pagan religiosamente sus cuotas de afiliación y que tienen en el Seguro Social la única puerta para atender sus enfermedades.
Queda confiar que la situación será diferente en la próxima administración gubernamental, aunque por ahora ninguno de los candidatos presidenciales ha hecho públicos sus planes de gobierno no solo para el IHSS, sino para todo el sector de la salud, que arrastra iguales o más grandes problemas que los denunciados en este sistema de previsión