Editorial

Unidad, recuperación y covid

2021 es un año de grandes retos para el país. La reactivación económica, la reconstrucción de la infraestructura vial y productiva y la contención de la pandemia del covid-19 son solo algunas de las tareas a realizar en el nuevo ciclo.

Y no es que la situación antes de que la pandemia del covid-19 nos golpeara de frente en marzo del año pasado era de bonanza, pero sus consecuencias en el campo de la salud y de la economía han sido devastadoras para el pueblo.

Sin embargo, las aspiraciones son volver al punto en el que se estaba en aquel entonces y, como primer punto, recuperar los empleos formales, los puestos de trabajo informales y las empresas que se perdieron como consecuencia del confinamiento obligatorio al que nos vimos sometidos con el fin de contener el avance de la enfermedad.

Alcanzar las metas requerirá del esfuerzo, la unidad y el trabajo de todos los y las hondureñas, principalmente de la clase política que se encamina a procesos de elección de sus candidatos a cargos de elección popular con campañas en las cuales se profundizan las heridas y la división de una sociedad que demanda, en vez de insultos, propuestas de solución a sus problemas históricos.

Hay que tener claro, además, que la ansiada recuperación económica solo se logrará si actuamos responsablemente frente al covid-19: el gobierno, disponiendo de un sistema de salud fortalecido con capacidad de atención para todos los que demanden sus servicios, actuando firmemente contra quienes a todas luces han mal manejado fondos destinados al manejo de la pandemia, y la población, cumpliendo con todos las medidas de bioseguridad recomendadas para evitar el riesgo de contagio y muerte.

Hay que tener claro que un nuevo cierre de la economía en estos momentos sería catastrófico para el país.