Cartas al editor

La bomba de población

La población de Honduras ha pasado los nueve millones de habitantes en el año 2018. Esto sin contar los que viven en el exterior ni los niños que han nacido allá. En 1950 la población de Honduras era en cifras redondas 1,500,000 personas.

¿Cómo es posible que en menos de 70 años la población se haya sextuplicado? En parte se debe a los avances médicos como los antibióticos, el desarrollo de vacunas contra la poliomielitis, el tétano neonatal, el sarampión, las paperas, la rubeola y la varicela, el control de la malaria, la tuberculosis y el sida mediante nuevos y efectivos tratamientos, todo esto ha disminuido la mortalidad general y en especial la mortalidad infantil, que ahora es de 17.2 por mil nacidos vivos. Por otro lado, la expectativa de vida al nacer ha subido a 75 años. El número de ancianos mayores de 80 años también sigue aumentando. Honduras ha llegado a ser el segundo país más poblado de Centroamérica, superado únicamente por Guatemala. La explosión de la población explica el aumento de la pobreza, las maras y pandillas y la emigración a otros países. El crecimiento poblacional no ha ido a la par con el crecimiento económico. Por otro lado, la corrupción en todas las esferas del gobierno ha sido un factor que ha incidido en la injusta distribución de la riqueza y en la falta de oportunidades de trabajo. La gran tragedia es que a los niños del milenio, que ahora son jóvenes, son los que buscan las maras para convertirlos en pandilleros, sicarios y extorsionadores. Por eso muchos están huyendo o emigran a otros países y otros están en la cárcel o en el cementerio. Honduras está perdiendo su fuerza de trabajo y poniendo en precario su futuro desarrollo.