Decenas de miles de personas marcharon este sábado hacia el parlamento español para protestar por una iniciativa de ley del gobierno que busca restringir el derecho de abortar, permitiéndolo solamente en casos de violación o riesgo grave para la salud.
La movilización fue organizada por decenas de grupos de mujeres y entidades que defienden los derechos reproductivos.
Los manifestantes coreaban lemas como '¡Nosotras parimos, nosotras decidimos!' y llevaban pancartas con frases como 'Madres y padres en libertad'.
El gobierno socialista anterior legalizó ampliamente el aborto antes de las 14 semanas de embarazo. Sin embargo, el gobernante Partido Popular (PP) coincide desde hace mucho tiempo con la Iglesia católica en temas sociales y morales e hizo de cambiar la ley una de sus principales prioridades en las elecciones de 2011 que lo llevaron al poder.
El proyecto de ley necesita la aprobación del parlamento, donde el PP tiene amplia mayoría.
Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía, publicó el sábado en Twitter que el gobierno del presidente Mariano Rajoy debería 'retirar su regresiva reforma del aborto'.
Por su parte, Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), mostró una postura similar al advertir al jefe de gobierno que las marchas no cesarán hasta el retiro del anteproyecto.
'Le digo al señor Rajoy: retire usted la ley, porque no vamos a parar, como hicieron los ciudadanos contra la privatización de la sanidad madrileña, no vamos a parar hasta que usted retire esta ley del aborto que lo que hace es cargarse la libertad de las mujeres', aseguró.
Entre los defensores de la legislación, el ministro de Justicia Alberto Ruiz Gallardón minimizó el papel de quienes él mismo llama 'pseudoprogresistas' en la toma de decisiones sobre el tema.
'Estamos estudiando, hablando con insistencia, lo vamos a hacer nosotros y entre nosotros acordándolo como siempre hemos hecho las cosas', dijo Ruiz Gallardón. '¿Quiénes son ellos para etiquetar?'
'No es un tema de moral ni de conveniencia electoral', agregó, sino de defensa de los derechos básicos por encima de intereses particulares.
Una segunda protesta contra la polémica iniciativa de ley española se llevó a cabo cerca de la Torre Eiffel en París.