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El Papa proclamó santos a siete beatos que demostraron 'coraje heroico'

El feliz auditorio de todas las edades agitaba banderas filipinas, italianas, bávaras, estadounidenses, españolas y francesas.

21.10.2012

El papa Benedicto XVI proclamó el domingo santos a siete beatos en la Plaza San Pedro, destacando el 'coraje heroico' de esos evangelizadores, en momentos en que la Iglesia católica busca impulsar una nueva evangelización.

En su homilía en diferentes idiomas y ante unos 80,000 fieles, el Papa citó el ejemplo de cuatro santas -entre las cuales por primera vez una mujer amerindia, Kateri Tekakwitha- y tres santos que 'vivieron consagrados a Dios y al servicio generoso de sus hermanos'.

Bajo el sol, una multitud muy internacional de fieles se reunió ante la basílica adornada con grandes retratos en las tapicerías de los canonizados del día. El feliz auditorio de todas las edades agitaba banderas filipinas, italianas, bávaras, estadounidenses, españolas y francesas.

En este inicio de 'Año de la fe' que el Papa inauguró el 11 de octubre, y cuando está en curso un sínodo de los obispos sobre la 'Nueva Evangelización' en el Vaticano, las cuatro santas y tres santos son a la vez un símbolo de evangelización y de compromiso social.

Tras la ceremonia, durante la oración del Angelus, el Papa confió a la Virgen María 'los misioneros hombres y mujeres, los sacerdotes, los religiosos y los laicos que en todas partes del mundo siembran la buena semilla del Evangelio'.

Benedicto XVI, de 85 años, recorrió en coche, con aspecto cansado pero feliz, la plaza repleta por la multitud, que le saludaba calurosamente.

Al menos 1,500 peregrinos canadienses, en su gran mayoría amerindios, asistieron a la canonización de Kateri Tekakwitha (1656-1680), conocida como 'el Lirio de los Mohawks'. Es la primera santa de las tribus amerindias de Norteamérica, durante mucho tiempo oprimidas.

'Kateri nos impresiona por la acción de la gracia de su vida, en ausencia de apoyos exteriores, y por su coraje en su vocación tan particular. En ella se enriquecen fe y cultura. Que su ejemplo nos ayude a vivir allí donde estemos, sin renegar de quienes somos', declaró el Papa.

Una pareja de estadounidenses, Daniel, de 65 años, y Magdalena, de 67, vinieron desde Nuevo México para Kateri: 'Mis antepasados vinieron con los Conquistadores de España. Hubo abusos en todas parte. Más de 400 tribus indias han sido reconocidas por el gobierno estadounidense, otras todavía no lo han sido y hay problemas de territorio', subrayó Magdalena.

Otra figura célebre en Norteamericana canonizada el domingo es la de la franciscana de origen alemán Mariana Cope (1838-1919), un 'ejemplo luminoso y enérgico' que estableció un sistema de cuidados para los leprosos en Hawai.

Junto a estas dos mujeres, también fueron canonizadas María del Carmelo Selles(1848-1911), española y fundadora de la Congregación Hermanas de la Inmaculada Concepción, que trabajó con jóvenes desfavorecidas y prostitutas, así como la bávara Anna Schaffer (1882-1925). Gravemente quemada y en cama toma su vida, desempeñó un papel clave de evangelización. 'Desde su cama, ha curado a los demás', subrayó Ingrid, de 24 años, que encabezaba un grupo de fieles bávaros.

Miles de estadounidenses oriundos de Hawai también se desplazaron hasta la Santa Sede. Muchos participaron el viernes en los jardines del Vaticano en una fiesta, con cantos tradicionales, en honor a esta religiosa.

En la multitud del domingo, muchos filipinos, venidos desde Roma o desde su país de origen, festejaban a Pedro Calungsod (1854-1672), un catequista de 17 años martirizado en Guam. 'Estamos orgullosos de ser filipinos', indicó un fiel a la AFP.

El Papa deseó que el ejemplo del santo jesuita francés y malgache, Jacques Berthieu, que murió ejecutado en 1896 en Madagascar por rebeldes del movimiento Menalamba, 'ayuda a numerosos cristianos perseguidos debido a su fe'. 'Que su intercesión tenga frutos para Madagascar y el continente africano', dijo.

Benedicto XVI distinguió también al religioso que ayudó a jóvenes obreros de la revolución industrial italiana de finales del XIX, el padre italiano Giovanni Battista Piamarta (1841-1913).

Estas nuevas canonizaciones elevan a 44 los santos proclamados por Benedicto XVI desde el inicio de su pontificado en 2005.