A finales de octubre de 1998 el huracán Mitch destruyó las instalaciones de la antigua Penitenciaría Central (PC).
Han pasado 14 años del paso de este fenómeno y el viejo edificio, declarado patrimonio nacional en noviembre de 2002, se muere cada día en el abandono.
Hace aproximadamente unos cuatro años, a través de la Alcaldía Municipal del Distrito Central, se realizan esfuerzos por levantar sus ruinas.
Desde un mercado de primera clase, un anfiteatro cultural y la terminal del moderno sistema de transporte rápido Trans 450 son algunos de los proyectos pensados para poner en valor lo que queda de este viejo inmueble.
Las mismas autoridades como el titular de la Gerencia del Centro Histórico, Arturo Suárez, reconocen que solo han sido propuestas, que se quedan en el camino por la falta de apoyo o validación social.
“Durante los últimos tres o cuatro años se ha estado tratando de encontrarle una solución de uso al predio de la antigua penitenciaría. Se han evaluado muchas propuestas por parte de la Alcaldía Municipal, pero al día de hoy tampoco se ha llegado a algo en concreto”, señaló Suárez.
De estas acciones hay evidencias de los llamados madrugones patrimoniales realizados a varios inmuebles en abandono, públicos y privados, incluyendo la PC, en los primeros meses de 2010.
Proyecto rescate
Empero el momento para rescatar y no dejar que se termine de caer este edificio histórico, construido en 1880 durante la administración de Marco Aurelio Soto, llegó.
Como siempre, la idea es devolverle a los capitalinos no solo un sitio recreativo, sino un espacio generador de arte y cultura.
En ese sentido, Suárez informó que hace dos años, un colectivo de artistas viene trabajando en este sentido.
El objetivo es intervenir este espacio público, ya sea con presentaciones teatrales, escultura reciclada, entre otros tipos de manifestaciones artísticas.
Así la antigua PC se levantará entre sus escombros, donde quedará atrás lo que antes fue un sitio de represión, para volverse un espacio de expresión cultural y convertirse en lo que se ha denominado un “vivero de las artes”.
Se busca crear un centro con potencial para la cultura y el arte, pero que sobre todo impulse a jóvenes artistas, pues la ciudad carece de estos espacios.
“Queremos que este sea un espacio multidisciplinario en el cual todas las manifestaciones artísticas tengan cabida y que sobre todo sea un espacio de expresión”, manifestó el funcionario municipal.
Para garantizar que no se trata de otro “alegrón de pobre”, Súarez informó que se conforma un comité, un movimiento ciudadano que actuará como gestor y creador de un proyecto con el que verdaderamente se rescate este sitio histórico.
Este movimiento está integrado por los gestores culturales, la comunidad artística y cultural, que trabaja en el centro histórico, los vecinos, las instituciones como Mujeres en las Artes, Museo del Hombre Hondureño y el Centro Cultural de España.
También integran este comité la misma Alcaldía Municipal a través de la Gerencia del Centro Histórico, el Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH) y la Secretaría de Planificación (Seplan), entre otras entidades.
Además habrá cabida para todas las personas que piensen que la antigua PC puede funcionar como un sitio amplio de difusión cultural y de arte.
A opinión del arquitecto urbanista Luciano Durón, este sitio reúne las condiciones para convertirse en un centro cultural donde perfectamente pueden aprovecharse sus ruinas, como los torreones, iglesia y dependencias. El espacio debe estar acondicionado con árboles, plazas, fuentes de agua y lugares para manifestaciones como el teatro y la música.
Feria de la Cultura
Entre las acciones para crear conciencia y sentido de pertenencia entre los ciudadanos de lo que a futuro será la antigua PC está la realización de la II Feria de la Cultura.
Este es un evento que se desarrollará del 21 al 25 de noviembre bajo el lema “Imagina, participa y transforma” y que es promovido por Mujeres en las Artes Leticia de Oyuela. “La Feria de la Cultura comprende varias actividades de recreación con una combinación de arte, música y diferentes intervenciones artísticas. La idea es utilizar las instalaciones de este lugar para promover su rescate”, informó Carolina Torres, del Mua.
El propósito final es propiciar en estas instalaciones eventos artísticos para que el público asista y se apropie del espacio como centro del arte.
