Honduras se prepara para enfrentar uno de los fenómenos más devastadores del planeta.
Personal de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco)
participó en un taller realizado del 11 al 15 de febrero en El Salvador, en el que también participaron representantes de organismos de protección civil de otros países de Centroamérica, Panamá y México.
El encuentro, presidido por expertos del Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico con sede en Hawáii (PTWC) y del Centro Internacional de Información de Tsunamis (ITIC/NOAA), tenía como objetivo mejorar los sistemas de alerta temprana en la zona costera del océano Pacífico.
Los técnicos de Honduras y el resto de naciones de la región fueron actualizados en un nuevo sistema que el PTWC implementará para emitir alertas de tsunamis,
mismo que contendrá más información respecto a los niveles de amenazas en el que se encuentran cada uno de los países con costas en el océano Pacífico.
Dicho sistema incluye tiempos de arribo de las olas, amplitud de las olas en aguas profundas y altura estimada de las olas frente a las costas de cada país.
El Pacífico y sus mares adyacentes son el mayor, más diverso y más propenso a los tsunamis de todos los océanos de la tierra.
Entre los expositores se encontraban: Dr. Charles McCreery, director general del Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC); la Dra. Laura Kong, directora del Centro Internacional de Información de Tsunamis (ITIC/NOAA); el Dr. Walter Mooney, sismólogo del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS); el Dr. Bernardo Aliaga, secretario técnico del Sistema de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWS) y el Sr. Nicolás Arcos, especialista en Información sobre Tsunamis de ITIC/NOAA.
En el taller se abordaron temas como la detección y monitoreo sísmico, evaluación de la amenaza y la elaboración de procedimientos de operación en caso de tsunami para eventos locales, regionales y lejanos, así como en la emisión y diseminación oportuna de alertas.
Además, se discutió la respuesta a la emergencia y evacuación, incluida la determinación de puntos de ubicación de las señales de evacuación, identificación de rutas de evacuación, determinación de zonas de concentración y albergues.
El evento regional contó con el cofinanciamiento de la Oficina de Atención de Desastres de la Agencia de Cooperación Internacional de los Estados Unidos (USAID/OFDA por sus siglas en ingles), de la Agencia para los Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA por sus siglas en ingles), del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) y de UNESCO.