Tegucigalpa, Honduras
Las limitaciones de territorio y las dificultades que enfrenta el sector agrícola salvadoreño hacen que la producción sea reducida.
Según cifras recientes del Ministerio de Agricultura y Ganadería y el Banco Central de Reserva de El Salvador, la producción nacional alcanzó a cubrir solo un 46% de la demanda interna, mientras que las importaciones significaron un 54% en el año 2016 para el sector en general.
La dependencia de las importaciones para satisfacer la demanda de algunos productos puede resultar mayor, en el caso de melón, zanahoria, lechuga, coliflor y brócoli.
Ante ello, la Fundación para la Inversión y Desarrollo de Exportaciones (Fide), con apoyo del Gobierno de Japón, presentó el Diagnóstico para la comercialización de frutas y vegetales frescos y procesados de Honduras en El Salvador, como parte del proyecto Fortalecimiento comercial de empresas, promoción de exportaciones e inversiones.
De acuerdo con el reporte, los productos hondureños con mayor potencial exportador al vecino país son tomate, repollo, plátano, banano, naranja y lechuga. Para ello, los productores nacionales deben aprovechar las temporadas del año con menor disponibilidad de oferta local del mercado salvadoreño.
“Hay un potencial muy alto para que esta demanda pueda ser abastecida a través de productos guatemaltecos y hondureños. Después del mercado nacional, el mercado salvadoreño para Honduras representa una oportunidad grande de colocar sus productos”, explicó Roxanna Posada, directora de Proyectos de la consultora Unimer.
La empresa con más de 30 años de trayectoria en investigación de mercados y opinión en Centroamérica ganó la licitación pública y por más de tres meses realizaron las indagaciones sobre la identificación de las frutas, vegetales y hortalizas frescas provenientes de Honduras.
Entre las recomendaciones a partir del estudio destaca el aprovechar el potencial de productos procesados como las conservas y los encurtidos, los cuales han experimentado una tendencia a la alza en las importaciones y también tienen alta incidencia en el consumo.
Asimismo, sugieren aprovechar las oportunidades que ofrece la piña como materia prima para diversos productos procesados, lo que pudiese favorecer el aprovechamiento de la fruta en un esquema de economía de escala. En cuanto a vegetales y hortalizas, productos como papa, zanahoria, pataste, tomate, chile dulce, cebolla blanca, ejote (vainita), brócoli, pepino, lechuga, cebolla roja, yuca (mandioca), elote, coliflor, ayote y repollo son consumidos por las familias salvadoreñas.
También en los últimos cinco años el aguacate ha tenido un crecimiento acelerado, ha pasado de 13.7 millones de kilogramos en 2012 a casi 49 millones de kilogramos para 2016.
“Este documento ofrece una visión general de las posibilidades que presenta el mercado salvadoreño para frutas y vegetales frescos y productos procesados, como derivados de frutas y vegetales. Así como información de mercado relevante que puede ser utilizada por las empresas nacionales, productores y exportadores que producen y procesan dichos productos, con miras a la internacionalización de sus operaciones”, explicó Teresa María Deras, directora ejecutiva de la Fide.
Agregó que el trabajo de investigación que han desarrollado tiene el propósito de ser una fuente de consulta para todas aquellas empresas vinculadas al sector agrícola, en especial a los subsectores hortícola y frutícola, así como para las instituciones de Gobierno y el sector privado que apoyan a este sector productivo para desarrollar políticas y planes de acción que impulsarán su crecimiento y desarrollo.
Balanza
Honduras exportó el año pasado al mercado centroamericano $885.7 millones, de los que $330.3 millones fueron a El Salvador. En tanto, las importaciones superaron los $2,087.8 millones, siendo la mayoría de Guatemala ($1,011.4 millones) y luego de El Salvador (550.0 millones de dólares), conforme a un reporte del Banco Central de Honduras (BCH).
La Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) reportó que las exportaciones totales de Centroamérica sumaron $30,669.7 millones al cuarto trimestre de 2017 y registraron un incremento del 9.8% respecto a 2016. El balance de las exportaciones centroamericanas indica que 30.8% del total se realizaron en el mercado intrarregional y el remanente 69.3% hacia terceros mercados.
Mientras, las exportaciones intrarregionales crecieron 3.4% en comparación a 2016, las exportaciones hacia terceros mercados lo hicieron en 12.9%. Los mercados de mayor dinamismo exportador fueron los más tradicionales, como Estados Unidos y la Unión Europea, junto con el mercado asiático con países como China, Taiwán y Japón.