Deportes

Boniek García, estrella del Houston Dynamo

Extensa charla con el astro de la MLS; “en Olimpia maduré lo suficiente”, asegura, al tiempo que ve como “obligatorio” ganar en Cuba.

21.08.2012

El maestro del regate llegó a la MLS para triunfar y, mientras juguetea por la banda derecha con la camiseta naranja del Houston Dynamo, el número 27 alista sus mejores joyas para una función que esperan él y el Mundo Blanco con harta impaciencia: agosto 30 en el Nacional cuando, por la Liga de Campeones de Concacaf, Dynamo y Olimpia midan fuerzas en Tegus...

“Espero ese partido, pero no estoy ansioso. Sí deseo hacer un gran juego, sabiendo de antemano que no habrá muchos espacios para mí, como me lo dijo la semana pasada Juan Carlos García, con quien hablé vía teléfono”, cuenta Boniek.

El hijo de óscar García, aquella leyenda del Albo que dejó tres herederos en Liga Nacional (además de Boniek, Samir García y Yobani ávila), es una fija en las portadas de los diarios estadounidenses y esta vez habló con Eduardo Solano, periodista multimedia de La Voz de Honduras, diario digital que sigue la actualidad de los catrachos en el mundo.

De capitán de Olimpia a estrella del Houston Dynamo. Ha sido un proceso largo, ¿no es cierto? Desde que llegó Danilo Tosello me dijo que yo sería el capitán y no lo dudé. Al principio me lo pasé muy mal, con dos expulsiones seguidas, pero los errores me ayudaron a crecer y a manejar la capitanía de una mejor forma.

¿Pero hace cuánto tiempo te sentías apto para salir de Olimpia? Hace como cuatro años sentía que era el momento para emigrar, lastimosamente tuve muchas expulsiones y les reclamaba mucho a los árbitros... eso fue lo que impidió que saliera antes.

Bueno, llegás a la MLS y gozás de un éxito inmediato. ¿Te lo esperabas? Sinceramente, en Olimpia logré madurar lo suficiente y el equipo me vendió en el momento ideal; acá he llegado a trabajar, a luchar, a ganarme un puesto y apoyar a todo el equipo.

Y viniste como jugador franquicia, además. Es una gran responsabilidad, Dynamo es un club muy respetado y la MLS me trajo para aportar lo que sé, gracias a Dios he podido brindarme al máximo y los resultados se nos han dado de acuerdo a lo planificado.

¿Era el Dynamo la única opción que tenías? El equipo venía hace un año y medio detrás de mí, quería que viniera y no se presentaba la oportunidad, Olimpia se negaba, hasta que llegué a estar listo en todos los sentidos. Osman Madrid y el señor Ferrari me habían dicho que me iba en junio, pero no me dijeron a qué equipo, de repente es que me entero por los periódicos y programas deportivos de mi traspaso y todo fue una inmensa alegría.

Y ahora sos titular indiscutible, ¿no? Desde el primer día los compañeros me daban la pelota seguido y eso me sorprendió y me hizo agarrar confianza y ya para el segundo partido la afición tenía pancartas con fotos mías. Lo que hago en cada partido es demostrarles que tengo muchos deseos de triunfar, ya que en Dynamo me abrieron las puertas.

¿A propósito de tu pasado reciente, pasás pendiente de Olimpia, el rival del 30 de agosto? Sí, he visto algunos partidos y sé que anda haciendo la cosas muy bien, como siempre. Sé que el 30 será un encuentro bastante complicado.

Confirmada después de ganar Olimpia la copa 25, el éxito que Rafael Ferrari (presidente del León) esperaba ganar para dar luz verde a la partida de Boniek, la operación de Garciíta goza de los mejores números: 10 partidos jugados, todos como titular, un gol, cuatro asistencias, 16 disparos y cinco remates a meta.

Tras el ingreso del hondureño, el Dynamo disfrutó una buena racha y se quedó invicto en ocho partidos, hasta la derrota del pasado viernes 10 de agosto contra los Red Bulls; a pesar de la derrota ante Nueva York, y tras el empate en casa 2-2 de este domingo ante Columbus, donde hizo una asistencia en el primer gol, Boniek García confía que Houston volverá a tener las buenas sensaciones de antes. “El ánimo no tiene que bajar”, afirma; “sabremos levantarnos”.

El reto de la Selección de Honduras...

Y si en el Houston Boniek García se está identificando con la gloria, en la Bicolor se viene el gran proyecto Brasil 2014, cuya última escala ha sido el amistoso ante Boca, en Miami, del que el orgullo del Perpetuo Socorro ya ha sacado sus conclusiones: “No creo que jugué un buen partido, tuve un poco de cansancio y eso me afectó, pero la Selección está con ganas”, admite uno de los hombres de confianza de Luis Fernando Suárez.

¿Qué análisis hacés del debut de Honduras, ante Panamá y Canadá? Contra Panamá no dimos lo que nosotros queríamos y, sin lugar a dudas, lo pasamos feo, pero contra Canadá revertimos las cosas y ahora entramos con la disposición de ganar los dos encuentros ante Cuba, que serán muy importantes para nosotros.

¿En qué se falló y en qué se debe mejorar en la eliminatoria mundialista? Debemos mejorar en todo sentido, tanto en defensa, en el medio y en ataque. Considero que nos está faltando esa fluidez de conectarnos entre nosotros, a pesar de tener semanas de entrenar, aparte que nos faltó entrega en esos dos partidos, pero vamos a mejorar.

¿Dos victorias ante Cuba lo cambiaría todo? Serán dos partidos muy importantes, trascendentales, pero no pensamos que van a ser fáciles, porque ya ellos complicaron a Panamá en casa y no creemos que serán sencillos. Tenemos la obligación de ganar los dos partidos ante Cuba.

¿Cómo ves la situación de los legionarios que no gozan de minutos con sus clubes o no tienen equipo. Creés que podría afectar a la Selección de Honduras? Sin lugar a dudas, echaremos de menos la presencia que impone Carlos Costly adelante o la verticalidad de Ramón Núñez, que nos da bastante profundidad en el ataque, pero lastimosamente no tienen actividad y así es bien difícil que el profe los considere.

La palabra de Boniek García ya se escucha en todo Houston, la ciudad texana donde vive y disfruta del fútbol la pieza que le faltaba al técnico Dominic Kinnear para dar ese último paso rumbo a la gloria emelesera, luego de los logros conseguidos en las campañas 2006 y 2007, donde levantaron la Copa del Este...