Un 'escupefuego' lanza una llamarada en plena calle mientras cae la tarde en la capital de Honduras, con la esperanza de recibir algunos billetes que lo ayuden a sobrevivir. (Foto: Estalin Irías)
El calor comienza a descender al tiempo que el sol se esconde tras las montañas en la zona sur de Honduras. (Foto: Jimmy Argueta)
La diosa Temis sostiene la balanza en una tarde calurosa frente a la plaza del Poder Judicial en Tegucigalpa. (Foto: Fredy Rodríguez)
Los seres vivos han tenido que aprender a vivir con la contaminación provocada por el hombre, como esta tortuga, que goza de los rayos del sol sobre una llanta desechada. (Fotos: Estalin Irías)
Grandes cactus se alzan en dirección al astro rey que los alimenta desde la punta hasta las raíces.
El implacable sol golpea con fuerza a los capitalinos, mientras un avión recorre el cielo despejado que deja pasar los fuertes rayos.
Un avión hace su aproximación al aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, una de las pistas más difíciles del mundo.
Recordando una de las postales urbanas más comunes en la capital, cargado con mercadería, niños y adultos, un pequeño camión recorre el anillo periférico.
Un hombre busca entre los desperdicios un objeto o material que pueda reutilizar o vender para agenciarse algunos centavos.
El fuerte verano hace parecer aún más áridas las colinas deforestadas por inconscientes hondureños.
Honduras dio un gran paso para la generación de energía renovable con el parque eólico de Santa Ana. (Foto: Jimmy Argueta)
En el sofocante calor de la zona sur de Honduras, un joven lidera dos bueyes cargando su carreta. (Foto: Jimmy Argueta)
