Tegucigalpa

Centros de recreación a la espera de la aprobación de su reapertura en la capital de Honduras

Las autoridades de Sinager evaluarán la posibilidad de abrir los parques naturales en las próximas semanas, se tomarán en cuenta los protocolos de bioseguridad y comportamiento de la enfermedad

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14.08.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Regresar y disfrutar de la paz, atractivo y naturaleza que brindan los tesoros verdes de la capital podría ser una realidad en las próximas semanas.

Así lo informó el titular de la Secretaría del Trabajo y Seguridad Social, Carlos Madero, al detallar que se está realizando un trabajo en conjunto con las autoridades de Turismo para un plan de reactivación de los parques naturales.

Entre las propuestas que se están evaluando está la posibilidad de formar burbujas familiares, es decir, grupos de un mismo núcleo y también de manera individual.

“En cada parque se tendrá que tomar medidas de distanciamiento y de bioseguridad, en los parques naturales es más fácil porque son grandes y son lugares de esparcimiento”, afirmó Madero.

Además, explicó que por la extensión de cada parque es posible evitar las aglomeraciones de personas.

El funcionario detalló que en unas dos semanas ya los capitalinos puedan ingresar de nuevo a las bellezas naturales.

Pulmones de la capital
Hasta el momento, el único parque que está abierto en el Distrito Central es el Parque de las Naciones Unidas El Picacho.

El pulmón verde de la ciudad tiene al menos 15 días de recibir personas después de más de cinco meses de permanecer cerrado.

Para ingresar al parque se deben cumplir estrictas normas de bioseguridad y para visitar el monumento del Cristo de El Picacho se debe volver a pasar por una rigurosa desinfección.

Olmeda Rivera, presidenta ejecutiva de la Fundación del Cristo de El Picacho, manifestó que el regreso de los visitantes ha ido mejorando con el paso de los días.

Rivera detalló que en los primeros días llegaban dos o tres personas e incluso hubo un día que no llegó ninguna persona, pero ahora están recibiendo unas 80 personas diarias, que es lo máximo que puede haber en el interior del monumento.

En el caso del cerro Juana Laínez, el cual había sido remozado con nuevos atractivos y que esperaba recibir por año a unas 300 mil personas, todavía mantiene cerrado el acceso a
los visitantes.

“Ya enviamos el protocolo a las autoridades del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) y estamos a la espera del visto bueno”, informó Erick Aguilar, director ejecutivo de la Fundación Ecológica de Tegucigalpa (FET).

El Parque Nacional La Tigra también se encuentra sin recibir a los capitalinos, pero se han mantenido los trabajos de monitoreo de la fauna y también los guardabosques realizan labores de vigilancia en la zona. Además se está promoviendo el cuidado de arbolitos en casas de voluntarios.