TEGUCIGALPA,HONDURAS.-Manos solidarias se han enlazado con fuerza y esperanza para construir un aula digna para los soñadores estudiantes del caserío de El Zurzular.
Desde que EL HERALDO mostró las deficientes condiciones en que recibían clases los alumnos de esta escuela en la que usan troncos como pupitres; sin uniformes, zapatos escolares ni cuadernos, la solidaridad lanzó un fuerte llamado a instituciones y personas de buen corazón para transformar la vida de los más de 50 estudiantes del centro educativo.
Uno de los grandes retos es el de sustituir una vieja covacha que sirve como aula por unas instalaciones dignas.
Este trabajo lo ha asumido con compromiso los integrantes de la Asociación de Cónyugues de Funcionarios de Naciones Unidas (Unhonlesa), pues además de aportaciones, han gestionado donaciones con organizaciones como Glasswing para poner en marcha la construcción de un aula de madera y un sistema de agua para los estudiantes.
El proyecto pretende ser finalizado en febrero del próximo año con el objetivo de que los alumnos inicien el año escolar en mejores condiciones.
Mercedes Zeceña, presidenta de Unhonlesa, manifestó que en el proyecto se han involucrado padres y madres de familia con la mano de obra.
También se ha recibido apoyo de parte de Comisión Permanente de Contingencias de Honduras (Copeco) para el traslado de material.
Todavía se requiere de apoyo para poder culminar con las obras escolares.
Por ejemplo se realiza un “Tablatón”, que consiste en donar desde 20 lempiras en adelante para comprar cinco mil pies tablares que requiere la construcción.
La donación se puede realizar a la cuenta de banco Atlántida número 012820080542 a nombre de María de los Ángeles Díaz Zapata.
