Tegucigalpa,Honduras
Construyeron sus viviendas sobre un suelo que aparentaba ser estable, pero cuando menos lo esperaban saltó a la vista la fragilidad de los terrenos.
En estas condiciones residen unas 300 mil personas de la capital, en zonas como: El Bambú, Altos de Santa Rosa, Campo Cielo y El Edén.
Las comunidades son consideradas como prioridad máxima para ser intervenidas, según las autoridades del Comité de Emergencia Municipal (Codem).
En estos sectores se reporta hundimiento de calles, agrietamiento de paredes y piso de las viviendas, y deslizamientos activos.
Ante estos indicadores, estas zonas se mantienen en lista de ser atendidas lo más pronto posible para evitar una tragedia. Es por esta razón que las autoridades de la Alcaldía Municipal en esta semana firmaron un convenio con funcionarios de la Cooperación Internacional del Japón (JICA), a través del cual se realizará un megaplan de mitigación.
En esta iniciativa también participarán las autoridades de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) y de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
“El componente lleva dos fases, la primera que consiste en la capacitación para analizar y entender cómo suceden los problemas de deslizamiento y la segunda es realizar la ejecución de los proyectos a menor y gran escala, con la supervisión de los expertos japoneses”, informó José Anariba, jefe de Alerta Temprana del Codem.
Como parte del proceso de este proyecto desde hace varias semanas las instituciones que ejecutan labores de prevención de desastres realizan un estudio para identificar los proyectos que se ejecutarán.
“Estamos trabajando en conjunto, luego del estudio se realizará el diseño de las obras a ejecutar, por lo que todavía no se conoce el monto de inversión”, explicó Anariba.
Este proyecto comenzará a ejecutarse en enero del próximo año y finalizará en el 2022.
Fortalecimiento de capacidades
Son cuatro proyectos que se ejecutarán, dos por parte de JICA y dos más hará la comuna capitalina, como contraparte.
Nasry Asfura, alcalde, manifestó estar contento con la firma del convenio que traerá un enorme beneficio a la ciudad.
“Por nuestra parte hemos ejecutado varios proyectos en barrios y colonias que reducen los riesgos”, agregó el edil capitalino.
Se formarán equipos técnicos de cada una de las instituciones involucradas y serán capacitados en el país y el extranjero.
“Copeco, como ente regulador del sistema, aportará los análisis de información, estudios previos y medidas que se deben implementar, perfiles de los proyectos y la supervisión”, manifestó Julio Quiñónez, subcomisionado de Copeco para el Distrito Central.
A largo plazo se plantea que luego de que el personal que esté involucrado en esta labor posea el conocimiento para replicar este mismo proceso en otras zonas de la ciudad y el país que requieran ser intervenidos.
“Este se vuelve como un proyecto modelo en la capital, se hará con mano de obra hondureña y tendrá la supervisión japonesa”, agregó Quiñónez.
