Salud y Belleza

Extracciones: hacia la sonrisa perfecta

Algunos tratamientos de ortodoncia sugieren remover piezas dentales, ya sea por temas de espacio o estética
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26.08.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Asimilar que en el lugar donde antes había piezas dentales ahora quedarán espacios vacíos no es para nada un proceso fácil. Las extracciones en ortodoncia son un tema delicado.

Con el propósito de lograr una sonrisa más armónica, con dientes y muelas bien alineadas, muchas personas acceden a colocarse brackets. Y aunque el tratamiento ya de entrada conlleva algunas limitaciones, el verdadero temor llega acompañado de la palabra “extracción”.

Más allá de la observación, las comparaciones y el punto de vista personal, tomar la decisión requiere siempre de la asesoría correcta. La odontóloga Shelly Almendares explica que “cada caso de ortodoncia debe ser evaluado minuciosamente por un especialista, quien va a determinar si es necesario o no remover piezas”.

La doctora esclarece que existen lineamientos a seguir para establecer un plan de tratamiento. “Hay medidas en nuestro cráneo que tienen que tomarse en cuenta, por lo que desde un inicio el paciente debe tener al día sus radiografías panorámicas, lateral de cráneo y estudios cefalométricos, antes de dar marcha al proceso”, apunta.

Almendares explica que las extracciones se indican básicamente cuando no coinciden la cantidad de dientes con el hueso, ya sea porque este es muy pequeño para alojar las piezas en boca o porque estas son muy grandes para la mandíbula. También aplican cuando, al ver a la persona de perfil, la parte inferior de su cara se ve adelantada o sobresaltada.

Foto: El Heraldo

Las extracciones permiten cumplir metas en un menor tiempo que con otras dinámicas.



¿Qué piezas se retiran?
En palabras de la doctora, “los dientes que se extraen con mayor frecuencia son los premolares, que se ubican detrás de los caninos. Este paso por lo general se cumple en las etapas iniciales del tratamiento, en los primeros seis meses, aunque puede haber variaciones”.

En el caso de las cordales o muelas del juicio, usualmente se retiran cuando representan un riesgo para el paciente; por acumulación de sarro, de placa bacteriana o de caries, o porque puedan empujar los demás dientes que están en su posición ideal. “No todos los pacientes tienen cordales, y no todas las cordales se deben extraer”, aclara. Estas pueden removerse en el tiempo que sea más conveniente.

Asimismo, hay algunos casos muy particulares en los que hay que extraer dientes centrales, de la parte de enfrente de la boca, pero están muy lejos del margen común.

Pormenores
La especialista afirma que son muchas más las ventajas que las desventajas respecto al proceso. En cuanto a los pormenores, rescata que para algunos resulta bastante incómodo tener visibles los espacios vacíos, pero que esto solo será por un tiempo, en tanto el resto de piezas se corren. “A largo plazo el paciente lucirá una sonrisa en donde todos sus dientes estarán ubicados idóneamente”, garantiza.

Foto: El Heraldo

Al retirar las piezas, el espacio que queda cerrará completamente tras correrse el resto de los dientes y muelas.



Otro inconveniente es que si la persona, al finalizar su tratamiento, no utiliza correctamente sus retenedores, con el tiempo se podrían abrir pequeños espacios en la zona, no tan amplios como cuando se extrajo el diente, pero sí generarían, sobre todo, acumulación de restos alimenticios. “Entonces, un paciente con extracciones tiene que ser cuidadoso con sus retenedores”, resalta.

Cambios significativos
Las extracciones en ortodoncia sirven para mejorar la sonrisa, tener un rostro más armónico, que los dientes ocluyan mejor al momento de morder, proteger las piezas entre sí y contribuir a la estética facial.

“Existen otras técnicas como la distalización dental, que nos permite llegar a los mismos resultados sin tener que remover piezas, pero igualmente conlleva otra serie de implicaciones, como un tiempo de tratamiento mayor”, advierte la experta.

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