El tiempo es el mayor enemigo, ya que cada día miles de personas mueren por los efectos del coronavirus y las economías permanecen paralizadas o funcionando a medio vapor ante el temor de contagios masivos.
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Los expertos en el tema han enfatizado en que una vacuna es la única forma de retornar a la 'normalidad' que se tenía antes de la pandemia, ya que reconocen que el virus seguirá moviéndose entre la humanidad de forma permanente, así como ha sucedido con otras enfermedades como la influenza, la viruela, entre otras.
Normalmente desarrollar una vacuna toma años de estudio, pruebas y errores, hasta lograr el antídoto correcto. Sin embargo, en esta ocasión, los científicos trabajan contrarreloj y esperan concluir en los próximos meses los primeros modelos.
Proceso de creación de una vacuna
Fase 1: Estudio preclínicoEn esta etapa la vacuna es creada dentro del laboratorio tras al menos 2 años de exploración, pero como no se sabe qué tan efectiva puede ser y como generalmente la primera prueba solo sirve para verificar las cosas en las que se puede seguir mejorando se realizan pruebas en animales.
El objetivo es identificar la cantidad de anticuerpos que produce y que no genere efectos secundarios negativos en el sistema inmunológico.
A menudo esta etapa puede durar entre 1 a 2 años. Pero en el caso del coronavirus, algunos de estos modelos lograron pasar esta etapa en un periodo de tres meses.
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Fase 2: Prueba en muestra selectiva
La segunda etapa se realiza cuando se ha confirmado que la vacuna produjo anticuerpos en los animales utilizados para las pruebas. Una vez logrado esto se procede a aplicar la dosis a un reducido grupo de personas.
Los voluntarios de esta muestra deben ser personas sanas y jóvenes, de esa manera se evita causar efectos que pongan en riesgo sus vidas.
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Fase 3: Experimentación con grupos más grandes
En la tercera y última fase clínica se aplica la vacuna en las dosis correctas a grupos más grandes y variados. Al igual que en el primer grupo los médicos deben ir controlando la evolución de los voluntarios e ir respondiendo a preguntas como: ¿El antídoto realmente evita contraer la enfermedad?, ¿Cuál es el porcentaje inmunológico que aporta?, entre otras.
Si la vacuna resulta ser la adecuada se comienzan los trámites ante los organismos de salud correspondientes para ser aprobada como un medicamento oficial y posteriormente comenzar su distribución y aplicación a las masas.
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Vacunas prometedoras
Cerca de 20 vacunas ya se están probando en humanos. Pero tres de ellas se han puesto a la cabeza del grupo como las posibles candidatas:1. Oxford y AstraZeneca
La vacuna se comenzó a raíz de una muestra de un virus que causa gripe en chimpancés y es genéticamente similar a la cepa del coronavirus. Los científicos lo modificaron para lograr que no causara infecciones en los humanos.
Los ensayos iniciales se llevaron a cabo con un grupo de más de 1,000 voluntarios de los cuales más del 90 por ciento desarrolló anticuerpos.
Actualmente se encuentra en la última etapa de pruebas con voluntarios de varios países entre ellos Reino Unido, Estados Unidos y Brasil.
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2. Vacuna de Moderna
El laboratorio clínico de la empresa Moderna Therapeutics también fabrica un modelo prometedor, que al igual que en el caso de Oxford, ya se encuentra en la última etapa.
Esta vacuna lo que hace es inyectar un pequeño fragmento del virus dentro del sistema inmunitario sin causar infecciones ni síntomas para lograr generar inmunidad.
Este martes 27 de julio entró en la última fase de pruebas masivas.
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3. Vacuna de Sinovac Biotech
Esta vacuna se desarrolla en China y usa el virus Sars-CoV-2 el cual está químicamente inactivo. Actualmente también está en la última fase de prueba .
La compañía a cargo de su fabricación firmó un acuerdo con las autoridades de Brasil para que su prototipo comience a ser probado en cerca de 10,000 voluntarios entre personal de salud y el resto de la población.
4. Vacuna de Sinopharm
Este otro laboratorio chino desarrolla otro prototipo de virus inactivo, es decir, que no hay posibilidad que al ser inyectado enferme a las personas.
A finales de abril cerca de 100 personas recibieron una dosis de la inyección y posteriormente desarrollaron anticuerpos.
Posteriormente, a principios de julio, este modelo fue llevado a Emiratos Árabes Unidos para ser probado en casi 15,000 voluntarios, quienes serán supervisados durante un año.
De esta forma, aunque las antes mencionadas representan las más adelantadas, hay otras vacunas que van siguiéndoles los pasos y podrían eventualmente convertirse en la cura contra el enemigo invisible.
Todos los científicos coinciden en que pensando de forma optimista, a mediados de 2021 ya se podría tener una vacuna para combatir la enfermedad, lo cual dependerá de la cantidad de inmunidad que esta genere y la capacidad que tenga de hacer que el sistema inmunológico recuerde al virus.
