La puntualidad, el ADN del éxito

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- “Otra vez tarde”, “siempre llegas después de la hora”... ¿Se le conoce por llegar a desatiempo a sus compromisos? “Fue culpa del tráfico”, “la lluvia me retrasó”, “surgió un evento inesperado...” ¿Suelen ser esas sus excusas continuas? Si es así, sepa que usted no es una excepción.

Se calcula que un promedio del 20% de la población mundial llega tarde consistentemente, pero hay esperanza para vencer este mal hábito y afinar la apreciada costumbre de ser puntual.

¡Tome nota!
Ajuste su actitud. La impuntualidad proyecta incompetencia, egoísmo y desorganización, una tríada letal para cualquier emprendimiento. En cambio, ser puntual le aporta una ventaja decisiva para el éxito. Dada la naturaleza finita del tiempo como recurso, organice su agenda en orden de prioridades.

Los humanos tendemos a ralentizarnos cuando se trata de compromisos que consideramos poco importantes. Por lo tanto, separe de su rutina actividades superfluas y asegurese de proveer una ventana de tiempo suficiente para cada actividad y reunión productiva.

Su actitud sobre el manejo del tiempo debe ser proactiva y clara, sin desviar su atención a aristas innecesarias que le carguen o atrasen. Sólo agende las cosas que considere importantes para su negocio.

2. Esté preparado para los contratiempos.
Lo único predecible de los imprevistos es que siempre suceden cuando menos usted lo espera. La palabra 'imprevisto' lleva implícita esa realidad.

Elimine hasta donde sea posible cualquier evento inesperado en su rutina, pero cuando suceda, tenga un paso adelante ya: planee de antemano. Agregue siempre un 25% de tiempo a cualquier plan o viaje que haga.

Si moverse del punto A al punto B le toma normalmente 30 minutos, planee unos 40 minutos para dicho viaje. Si cumplir con una labor en su empleo le toma 4 horas, aparte de antemano 5 horas para tal cometido. Es preferible estar una hora temprano que cinco minutos tarde. Para este fin, previamente usted debe llevar registro del tiempo promedio que le toca realizar una determinada tarea o tomar una ruta específica.

Sea realista No se sobrecargue. Es mejor decir “no” a una tarea, que decir “sí” y entregarla dos horas tarde. Aprenda a reconocer sus limitaciones y desarrolle el hábito de autoanalizar su velocidad y nivel de concentración para cada actividad.

3.La puntualidad comienza un día antes.
Si las mañanas le resultan pesadas y le cuesta tomar el impulso matutino, organice desde la noche anterior su despertador, atuendo, llaves, billetera, cartera, y de ser posible hasta su alimentación del día siguiente. Visualice mentalmente la ruta hacia su trabajo. Así en la mañana despertará y sin mayor dilación enfilará hacia su trabajo.

4. Sea realista.
No se sobrecargue. Es mejor decir 'no' a una tarea que decir 'sí' y entregarla dos horas tarde. Aprenda a reconocer sus limitaciones y desarrolle el hábito de autoanalizar su velocidad y nivel de concentración para cada actividad.