Un asilo de inválidos era el centro de operaciones delictivas de un cabecilla de la pandilla 18 parapléjico que fue capturado por agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) después de un trabajo encubierto de vigilancia.
Al detenido le decomisaron una pistola calibre 9 milímetros, el arma que portaba el empresario José Geovanny Cruz Fonseca, de 45 años, dueño del centro turístico Sol y Arena, el día que fue acribillado a balazos junto a sus dos hijos y un trabajador en la salida hacia el norte del país.
La DPI identificó al detenido como José Feliciano Rodríguez Orellana, de 38 años, alias “Chano”, quien según análisis de información realizada por un equipo del cuerpo policial, se encargaba de dar las directrices a miembros de la organización criminal desde su lecho de enfermo.
Al momento de ejecutar la captura, los investigadores le decomisaron el arma de fuego, cuatro teléfonos celulares y varias fotografías en las que aparece él y otros supuestos pandilleros.
Inicialmente, Rodríguez Orellana fue puesto a la orden de la Fiscalía para que se le instruya un proceso por los delitos de portación ilegal de armas y asociación ilícita, pero un equipo de inteligencia de la Policía continúa con las investigaciones orientadas a determinar su participación en otros hechos delictivos. La DPI constató en sus archivos criminales que Rodríguez Orellana tiene un total de 12 fichas delictivas relacionadas con robos y delitos contra la vida como asesinatos y homicidios, entre otros.
Operación policial
Con el objetivo de contrarrestar actos delictivos que han estado registrándose en hospitales, asilos y otros centros de atención a pacientes, equipos de la DPI iniciaron inspecciones en diferentes ciudades del país, según informó el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Leonel Sauceda.
Producto de ese trabajo, un equipo encubierto de la DPI detectó la presencia de un discapacitado, miembro de la pandilla 18, que estaba interno en el asilo de inválidos de la capital, por lo que inició una vigilancia y seguimiento para conocer los movimientos en torno al paciente.
Sauceda confirmó que la tarde de ayer agentes de ese cuerpo policial le dieron detención a Rodríguez Orellana en posesión de las evidencias antes mencionadas. El presunto pandillero fue trasladado sobre una camilla a las instalaciones de la DPI en la colonia Kennedy para seguir con el procedimiento legal ante la Fiscalía y el juzgado competente.
Mientras tanto, unidades de inteligencia policial investigan el tiempo que “Chano” tenía de permanencia en el centro y bajo qué circunstancias fue ingresado, ya que es considerado por las autoridades como un delincuente de alta peligrosidad.
En relación a la pistola decomisada, técnicos de la DPI constataron por medio del Registro Nacional de Armas que la misma era propiedad del empresario José Geovanny Fonseca Cruz, quien fue acribillado a balazos el miércoles 30 de septiembre junto a sus hijos Patrick Xavier Cruz Rivera (21) y Jonathan Cruz Osorto (16), y su empleado Franklin Isaac Ordóñez Bautista (22), frente a un restaurante ubicado en el kilómetro 1 del eje carretero. La DPI investiga la posible vinculación del detenido como posible autor intelectual de la matanza y cómo llegó el arma de la víctima a su poder. Una fuente de inteligencia reveló que durante el tiempo que duró la vigilancia detectaron la presencia de niños y de mujeres jóvenes que se presentaban constantemente a visitar a Rodríguez Orellana y recibir directrices.
