Al menos tres muertos y más de 30 heridos dejó una lluvia de disparos registrada este miércoles en el centro penal de San Pedro Sula, durante un motín en contra del traslado que llevaban a cabo las autoridades hacia otra cárcel de Honduras.
A eso de las 7:33 AM comenzó la balacera en las celdas donde se encuentra los paisas y pandilleros de la 18, quienes se resisten a ser llevados a otro presidio argumentando que temen ser asesinados.
Unos 400 agentes de la Policía Nacional y Militar encargados de la operación se movilizaron al centro penal para controlar la situación.
De acuerdo al portavoz de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional (Fusina), José Coello, los presos de alta peligrosidad estaban siendo trasladados a otra prisión de Honduras que, por motivos de seguridad no reveló, cuando inició el motín.
En la reyerta, más de 30 reos y cinco policías militares resultado heridos.
Entre los uniformados afectados figuran: Marlon Orellana, de 19 años, quien presenta una lesión por arma de fuego en el hombro; Douglas Ramos, de 25 años, con golpes en la cabeza; y Gustavo Valladares, de 23 años, con herida de arma de fuego en la muñeca izquierda.
De los fallecidos solo fue confirmado el nombre de Narciso Andino.
En las afueras del recinto se aglomeraron familiares y amigos de los reos, quienes externaron su preocupación luego de que trascendiera el desceso de varios internos.
Monseñor Rómulo Emiliani llegó al lugar para dialogar con los reclusos y confirmó que al menos dos murieron dentro del penal y siete u ocho policías se encontraban heridos.
'La mano de Dios ha actuado, porque si no, hubiera sido cientos de muertos. Estaban las cosas en su peor momento, los internos estaban bravísimos y los policías penitenciarios también estaban coléricos', reveló el religioso.
Una vez que la crisis fue controlada, las autoridades confirmaron el decomiso de siete armas de grueso calibre, ametralladoras, machetes, escopetas, 32 teléfonos celulares, nueve computadoras, un kilo de supuesta cocaína, marihuana y envoltorios con dichas drogas, los cuales fueron encontrados en bartolinas de los denominados 'paisas'.
En horas de la tarde, al menos 16 reclusos fueron trasladados bajos fuertes medidas de seguridad por elementos de la Policía Militar en helicópteros de la Fuerza Aérea de Honduras. A partir de hoy guardarán prisión en la cárcel de máxima seguridad en Támara.
Una situación similar se registró el lunes en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto (PNMAS), en el valle de Amarateca, cuando los internos intentaron amotinarse. Se informó que al menos 10 reos resultaron heridos.
El violento hecho se produjo luego que un total de 22 presos, entre coordinadores y subcoordinadores de módulos, fueron sacados del principal centro penitenciario de Honduras y trasladados bajo estrictas medidas de seguridad a un batallón de las Fuerzas Armadas que ha sido habilitado para albergar privados de libertad.
Población penitenciaria en San Pedro Sula
La población penitenciaria del viejo presidio sampedrano es de 2,939 internos, de los cuales 2,308 son hombres y 85, mujeres. De ellos hay 1,395 procesados y 987 condenados.
En las celdas del penal guardan prisión 277 miembros de maras y pandillas, de los cuales 233 pertenecen a la 18 y 44 a la Salvatrucha. También hay 44 extranjeros privados de su libertad.
Uno de los agentes informó que en 2013 los reclusos eran 2,100 y aumentaron en casi 400. El oficial de policía indicó que la cantidad de presos se mantiene, ya que hay varios a quienes les dan medidas y otros salen en libertad.
El penal sampedrano fue construido con capacidad para 800 internos, pero en los últimos años se ha sobrepoblado y los privados de libertad viven hacinados.
