El presidente Porfirio Lobo se reunió ayer de urgencia con la cúpula militar para emprender medidas contra las bandas del crimen que operan en Colón.
El encuentro se produjo luego del ataque perpetrado contra un convoy de las Fuerzas Armadas la tarde del lunes, en un sector conocido como Panamá, entre las aldeas Toscana e Ilanga, cerca de Sonaguera, Colón, en donde 5 elementos del ejército resultaron heridos de gravedad.
Lobo conversó con la cúpula de las Fuerzas Armadas sobre el clima de violencia e inseguridad que impera en el departamento de Colón, adonde pretendía viajar la semana anterior, pero de último momento se vio obligado a cancelar la gira ante la zozobra que se vive en la zona.
El gobernante afirmó ayer que el ataque a los cinco elementos del Ejército no fue perpetrado por campesinos, a consecuencia del conflicto agrario, sino por una banda criminal que opera en los departamentos de Olancho y Colón.
“Esos no son campesinos, eso no tiene nada que ver con el conflicto agrario, estos ya son otros, esa misma banda creo que es la que andaba por San Francisco de La Paz, se mueven entre Olancho y la zona de Colón”, indicó Lobo.
Aunque no se brindaron detalles sobre la reunión entre el mandatario y la cúpula militar, trascendió que las operaciones de las Fuerzas Armadas se verán fortalecidas en Olancho y Colón para capturar a los responsables del ataque y garantizar un ambiente de paz y tranquilidad en ambos sectores.
Informe
Sobre el hecho suscitado la tarde del lunes, el subsecretario de Defensa, Juan Carlos Fúnez, informó que los miembros del Ejército fueron atacados por al menos 30 individuos que mantienen atemorizados a los habitantes del sector de Sonaguera.
“El camión del Ejército fue emboscado cerca de la aldea la Tascosa, por el sector de Sonaguera; fueron emboscados por grupos irregulares alrededor de 30 delincuentes que se encontraban en ese sector. Estos delincuentes, y por informes que tuvimos, estaban realizando diferentes asaltos en la comunidad de la Tascosa, donde tenían sitiada a toda la comunidad, fue por esta razón que la fuerza de tarea Xatruch movilizó este comando con 11 soldados hacia esta comunidad para tratar de controlar este problema delincuencial”, informó.
“Cuando venía de regreso fueron emboscados, donde cinco de los soldados fueron heridos”, explicó. Los miembros de las Fuerzas Armadas afectados son: el sargento segundo, Carlos Orlando Campos, del 16 Batallón de Infantería; sargento raso Rony Abel Briceño Pérez, del 16 Batallón de Infantería; los soldados Roberto Nahún Mancía y Luis Alfredo Padilla, del 15 Batallón de las Fuerzas Especiales, y Domingo Ávila Chirinos, del 16 Batallón de Infantería.
Las autoridades de Defensa informaron que la banda se dio a la fuga tras atacar con armas de fuego al convoy de las Fuerzas Armadas. Las constantes disputas entre campesinos y empresarios por la tenencia de la tierra han incrementado los índices de violencia en el departamento de Colón.
El ataque armado contra el convoy militar se produjo entre la aldea Tascosa e Ilanda, cerca de Sonaguera, en el deparmanto de Colón.
Los agentes de la Operación Xatruch habían corroborado denuncias sobre asaltos a casas por parte de grupos irregulares en Tascosa.
La Fuerza de Tarea Xatruch II inició operativos en el Bajo Aguán
en agosto de 2011. Aunque uno de sus propósitos era detener a los responsables de las muertes por pleitos de tierras que se han producido en ese sector, hasta el momento no han trascendido detenciones.
El último ataque mortal en la zona se registró en febrero pasado, cuando dos guardias fueron asesinados por sicarios en moto, con la que la lista de muertos superó las cincuenta.
