La víctima fue identificado como Jorge Alberto Lagos Hernández (22), quien había desaparecido de la entrada de la colonia Las Brisas de Comayagüela.
Tras tres días de su desaparición y una búsqueda desesperada por parte de su familia, el joven fue encontrado pero ya sin vida.
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Su cuerpo fue encostalado por los criminales que lo raptaron y luego le quitaron la vida. El hallazgo se produjo en la orilla del río a donde los delincuentes lanzaron los restos.
La noche del viernes fue la última vez que vieron con vida a Jorge Alberto cuando regresaba de trabajar. Su jefe lo acercó a su casa, pero desde ese momento no tenían ningún indicio de su paradero.
El domingo -entre lágrimas- su madre lanzó un llamado para que le regresaran al muchacho con vida.
Hasta el momento se desconocen los motivos del crimen, así como la identidad de los malhechores.
