Sucesos

Fiscal de la Atic no disparó el arma, según investigación

La pericia forense y la autopsia arrojan que la agente de la Atic fue asesinada y no se suicidó

16.07.2018

TEGUCIGALPA, HONDURAS

La exfiscal de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), Sherill Yubissa Hernández Mancía, no disparó el arma que le quitó la vida.

EL HERALDO conoció que la prueba de residuos de pólvora hecha a las manos del cadáver de la exjefa de la Unidad de Delitos contra la Administración Pública en Copán dio negativa.

Esta prueba refleja que ella no se suicidó como lo hicieron ver desde un inicio sus compañeros de la Atic.

Así lo confirmó a EL HERALDO una fuente ligada a los cuerpos de investigación del Ministerio Público (MP) que además mencionó que hubo irregularidades en la escena del crimen.

Asimismo se encontró que la víctima tenía otras lesiones en el cuerpo aparte del balazo en la cabeza con que le quitaron la vida. Una de ellas es que su cuello, el rostro y las piernas presentaban moretones, señal de que su homicida intentó asfixiarla con un artefacto mecánico.

El cuerpo sin vida de Sherill fue encontrado el pasado 10 de junio en el interior del apartamento en que residía por sus compañeros que la fueron a buscar.

Desde un inicio, la Atic señaló que se trataba de un suicidio sin haber agotado las investigaciones. A su vez se conoció que el celular de la exfiscal fue dañado porque lo encontraron en el interior de una jarra de agua.

Se conoció que por una llamada telefónica de un alto funcionario de la Atic se ordenó a los fiscales de Santa Rosa de Copán que la entidad se iba a encargar de la investigación del caso.

Por esa acción se excluyó a la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y al médico forense autorizado para hacer el levantamiento lo dejaron como observador.

Amenazas

Por otra parte, la directora general de Medicina Forense, Julissa Villanueva, señaló ayer que las amenazas a muerte que está recibiendo ella y su equipo de trabajo se deben a este caso.

Mediante una conferencia de prensa dijo que debido a las amenazas tienen que movilizarse en carros blindados para estar prevenidos ante un atentado.

Villanueva recalcó que desde el punto de vista médico legal se trata de un homicidio y no un suicidio. “Lamento que la prueba científica forense quiere ser desacreditada y no lo vamos a permitir”, dijo Villanueva.