SOPA. Locura en la capital industrial por el partido de ayer, pero, como dicen que nunca falta un pelo en la sopa, en los alrededores del metropolitano era un relajo para poder entrar, y todo por la falta de coordinación entre los que manejan la seguridad y los dirigentes deportivos.
GANAS. Los empleados públicos se quedaron con las ganas de irse a descansar después del mediodía y, por más que estuvieron preguntando en esas redes sociales si iban a dar permiso, a la hora de la hora, neles pasteles. Por todo y por nada quieren feriado... Sean serios, como decía JTR.
REDES. “Por una vida mejor... Juan Orlando, Presidente... 2018-2022”, es la leyenda que aparece que en una pancarta que circuló ayer en las redes sociales. Se ignora si se trata de un montaje –como muchos- o si de verdad el hombre ya dio el banderillazo.... Ummmmm... ¿Estáis oyendo, Callejas?... ¿Estáis oyendo, “resignado”?...
BOLA. Una alta funcionaria –que ni por cerca pertenece al Poder Ejecutivo- es la que anda regando la bola de que un alto funcionario de Palacio regresa, como el hijo pródigo, al Congreso, porque, como es diputado. La bulla es que la misión del muchacho es empezar a cabildear con las bancadas antes de aquello que aprobó la Sala aterrice en el hemiciclo.
RAP. “Zapatero a tus zapatos”, le manda a decir “Netanyahu” a aquellos que están criticando las reformas al RAP, y que no saben ni papa de lo que están hablando. El presidente del Congreso dijo que él se hizo doctor porque no tuvo vocación para ser abogado, albañil, astronauta o delantero de la H.
RELOJ. Se aproxima el 11 de diciembre, Día del Ejército, y en las barracas ya están contra el reloj para conocer los nombres de los ascendidos, así es que, todos los caminos indican que hoy podrían pasar lisos en Choluteca, donde sesionarán los “papis” y “mamis” de la Patria. A ver, dijo el cieguito.
JUNTA. Los embajadores europeos se aparecieron ayer por los dominios de la Junta para ver qué ondas con las pruebas de confianza y todo el rollo de la elección de los nuevos dioses y diosas del Olimpo. Los ilustres de la Junta siguen bajo ataque, pero, a pesar de eso, parece que todo marcha sobre ruedas.
