ERROR. Puros sombrerazos eso del retiro del señor de la televisión, manda a decir Mauricio Oliva. “Y no tiene el 55 por ciento, pues, entonces, cuando sea presidente, que haga las reformas”, dice “Netanyahu”. Y por qué no habló, pues... El mismo Jary Dixon cree que esas amenazas de retirarse son un error y que el único ganador sería el PN.
SOLO. De los presidenciables, dicen, solo JOH ya abrió su cuenta bancaria. Y de la tendalada de candidatos a alcaldes y a diputados solo lo han hecho 30. Algunos le echan el clavo a los bancos, que están poniendo muchas trabas. A ver si los trillizos de la política limpia hacen algo.
PANDOS. El TSE por fin arrimará a los tribunales a aquellos picaritos que se dedican a hacer traslados electorales pandos. Erick dice que ya investigaron y la mayoría de esos traslados son ilegales, y advierte que perseguirán a los culpables, porque ya la rayitos con ese jueguito... ¡Vaya, hombre!...
CCPN. La otra cosa requeteconfirmada es que Mapa Soluciones pasa a “mejor vida” y que el propio power del CCPN, el “niño Gualaco”, le está apretando las tuercas a los ilustres del TSE para que la manden al carajo con todo y mikis, así es que, ya no habrá excusas para dudar de la contada.
LUZ. Qué penoso y vergonzoso. Los hondureños de los exbolsones tienen que ir a cargar sus celulares al otro lado de la frontera, es decir, a El Salvador, porque a este lado nunca hay luz. Las denuncias recogidas por EL HERALDO son elocuentes.
MP. Demoledor golpe del MP a la MS-13. La “Avalancha III” se llevó en la chalana a varios chepos que reciben moje de esta pandilla. ¿Y la depuración? La repartición se detalla en una hoja: 60 mil a policías de La Planeta, 30 mil a los de Chamelecón y La Pradera, 60 mil a los de La Paz, en La Lima... ¿Entonces?...
DPI. Lo triste es que la MS-13 también ha estado sobornando a personal del Instituto de la Propiedad y a agentes de la DPI asignados a archivos criminales, a cambio de la aplicación del borrador electrónico a sus antecedentes. Exitosa la “Avalancha III”.
UNAH. Ya ni vale la pena gastar tinta y tiempo en referirse a ese desmadre en la UNAH. La de nunca acabar. Con tiempo suficiente se advirtió hacia dónde iba eso, qué había detrás y quiénes eran los titiriteros, pero nadie hizo caso. Hoy está a punto a perderse el único período que quedaba, pero parece que eso aquí a nadie le importa.