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Basílica De esquipulas, epicentro de fe en Centroamérica

El recinto de estilo barroco, que data de 1758, es considerado el más grande de toda CA

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06.01.2018

Esquipulas, Guatemala
Para admirar la imagen del santo patrono del pueblo guatemalteco, el Cristo Negro de Esquipulas, los peregrinos deben recorrer un sendero dentro de la iglesia. En ese pequeño espacio se encuentra a diario Marco Antonio Murcia, un hombre de fe quien ha dedicado las últimas dos décadas de su vida a realizar las labores de sacristán en la Basílica Menor de Esquipulas.

“Yo siempre estoy aquí porque las personas vienen a dejar sus ofrendas florales y otras cosas más, entonces para no ponerlas sobre el altar yo me encargo de reubicarlas y que no representen un peligro para la santa imagen”, detalla claramente su misión.

Durante el tiempo que ha laborado en la iglesia, Murcia ha recolectado en su memoria un sinfín de anécdotas, pero lo que no deja de impactarle nunca es la inmensa fe con la que llegan los feligreses a doblar rodillas y elevar sus plegarias por la salud de un familiar o un amigo.

“Siempre vienen personas de todos lados y nos comparten que el Cristo les ha cumplido un milagro y por eso regresan a pagarle esa promesa”, comenta emocionado.

Ese es el caso de Marisol López, una creyente de Esquipulas quien siempre que viaja a otro sector del país le pide protección al Señor de Esquipulas.

“Una siempre tiene que pedir porque todos los planes le salgan lo mejor que pueda y hasta en eso el Señor me ha ayudado, por eso vengo a agradecerle todos sus favores”, dijo con convicción y fe.

Cada año la fe en el Señor de Esquipulas mueve un mar de gente hasta su morada en la Basílica de Esquipulas.

Se viene la fiesta
El hogar del Señor de Esquipulas es simplemente cautivadora. Ubicada en la cima de una pendiente, en el centro de la ciudad de Esquipulas, la Basílica Menor del Cristo Negro abraza la fe y la esperanza de los millones de feligreses que anualmente la visitan.

Es el edificio religioso más emblemático de la localidad y en esta primera quincena de enero se convierte en el epicentro del catolicismo latinoamericano, en especial de Centroamérica y del sur de México.

Cada año recibe a más de cuatro millones de personas, de las cuales al menos 1.5 millones de las visitas ocurren durante los primeros 14 días del mes de enero.

La fiesta religiosa alcanzará su mayor relevancia este 15 de enero, cuando se festeja al santo patrono local, el Cristo Negro de Esquipulas, fecha en la que culmina el novenario y las cientos de peregrinaciones que llegan de todos lados de Latinoamérica.

Otros fieles le celebran al Señor de Esquipulas el 9 de marzo, día que se recuerda la llegada de la imagen a la ciudad guatemalteca, hecho sucedido el jueves 9 de marzo de 1595.

Al ser el primer templo del santo patrono, los primeros peregrinos llegaron a venerar la imagen en este lugar a finales del siglo XVI. Sin embargo, las peregrinaciones o romerías eran tan numerosas que el lugar fue insuficiente. La imagen fue entonces trasladada a la iglesia parroquial cuando se finalizó su construcción a finales del siglo XVII.

En el interior del templo sobresalen tres enormes naves adornadas con vitrales.

Atractivo
Además de ser cuna de la creencia religiosa de millones de personas, la estructura física de la basílica es otro de los atractivos turísticos con que cuenta. El templo tiene una plataforma de cien metros de largo por 50 de ancho, orientada de norte a sur, así como 18 metros de altura en su parte central, en donde se encuentra ubicado un antiguo reloj.

En los cuatro extremos se levantan torres de 50 metros de alto donde se encuentran los campanarios en el tercer nivel de la torre frontal derecha. Es el único en América con cuatro torres de campanario, lo que lo convierte en un templo extraordinario. El acceso es una larga escalinata de doble vía de piedra labrada con barandales de concreto y entradas laterales más estrechas. El púlpito está adornado en oro y el altar está protegido por una reja de hierro, la cual cubre un vitral que en su interior guarda la imagen de Cristo Negro de Esquipulas.

La festividad ya está en puerta y don Antonio prepara sus oídos y su memoria para escuchar y registrar testimonios vivos de la fe.