La contaminación se respira en la ciudad de Siguatepeque, toneladas de basura se esparcen por las calles, a orillas de ríos y quebradas y la disposición de desechos sólidos se hace a cielo abierto.
En la actualidad se producen 25 toneladas diarias de basura que van a para a un botadero a pocos kilómetros de la ciudad, lo que genera contaminación.
Fallido plan
El Congreso Nacional en el 2010, mediante decreto 268-2010, aprobó un fondo de cuatro millones de lempiras anuales para recuperar el entorno ecológico de Siguatepeque.
Entre las actividades que contemplaba el programa estaba la reforestación del bosque Calenterique y las cuencas productoras de agua, limpieza de los ríos y quebradas y capacitación ambiental en las comunidades entre otras actividades.
La planificación inicial contemplaba sembrar un millón de árboles al año en zonas de reserva donde se incluirían más de 100 actores entre patronatos juntas de agua, estudiantes y otros.
Sin embargo, el proyecto solo se ejecutó en 2014 y parte de 2015, con varias entidades como la fundación Eco-Redes, la Cámara de Comercio, la Universidad Nacional de Ciencias Forestales U-Esnacifor y la Alcaldía Municipal.
La U–esnacifor fue la encargada de administrar los fondos y, según la Emilio Esbeih, rector de la institución solo lograron ejecutar alrededor de cuatro millones de lempiras.
“Creo que en los dos años se invirtieron alrededor de 4 millones de lempiras y quedan alrededor de 800 a 900 mil lempiras que no se gastaron y están disponibles”, dijo Esbeih.
Auditoría
Francisca Portillo, presidente de la Cámara de Comercio de Siguatepeque, pide al Tribunal Superior de Cuentas (TSC) realizar una auditoría sobre el manejo de fondos y actividades del proyecto.
“La ciudadanía no está de acuerdo con el plan que se ha llevado y nosotros como directiva hemos consensuado pedir una auditoría del proyecto al TSC”, dijo Portillo.
La empresaria aseguró que existe un reporte sobre el proyecto, pero que no está sustentado y que hay algunos datos que deben ser verificados.
Declaró que quieren retomar el programa, pero después de conocer los resultados del TSC. Y mientras el único programa de reforestación está varado en el municipio, se perdieron 300 hectáreas de bosque entre los años 2000 al 2005, detalla un informe de la Unidad Municipal Ambiental (UMA)
