Honduras

140 disparos recibió pandillero asesinado en hospital privado

El marero, con el alias de “El Dreamer”, era ingresado a un sanatorio para tratar heridas de quemadura bajo el cuidado de tres custodios cuando encapuchados los interceptaron y lo atacaron a balazos.

FOTOGALERÍA
27.01.2016

Tegucigalpa, Honduras
Alrededor de 140 disparos recibió el pandillero de la 18 asesinado la noche del miércoles en un hospital privado del barrio La Granja de Comayagüela. El hecho también dejó la muerte del policía que lo cuidaba.

Las víctimas fueron identificadas como Manuel Isaac Durón, alias “El Dreamer ”, supuesto integrante de esa pandilla y quien fue asesinado dentro del hospital y el policía petinenciario, Noé Perfecto Molina cuyo cuerpo quedó boca abajo y con las manos esposadas hacia atrás en el área de estacionamiento.

Noche de terror
Testigos del sangriento hecho relataron que a las 7:45 de la noche llegó al Centro Médico de La Granja, a inmediaciones de Juzgado de Letras Penal, en Comayaguela, un vehículo de la Penitenciaria Nacional Marco Aurelio Soto en el que se transportaba el marero bajo el resguardo de tres custodios.

El dantesco crimen se registró la noche del miércoles en un hospital privado del barrio La Granja de Comayagüela.

Todos los custodios bajaron del carro para resguardar a Durón durante su visita médica, pero los bandoleros, que se movilizaban en un vehículo 3.0 les salieron al paso y los encañonaron con armas de grueso calibre y los despojaron de sus fusiles, según versiones preliminares.

Tras someter a la impotencia a los centinelas, dos de los asesinos se dirigieron hacia el policía Perfecto Molina para esposarlo y dispararle.

Ese momento fue aprovechado por Manuel Isaac Durón para huir hacia el hospital, pero sus verdugos lo capturaron en la puerta de la sala de emergencias de Centro Médico y luego lo acribillaron.

Antes de matar al Dreamer, los asesinos gritaron a los pacientes de la emergencia que se tiraran al suelo, luego protagonizaron la balacera en el interior.

Decenas de Policias Preventivos y de la Policia Militar del Orden Público acordonaron el área para evitar la contaminación de la escena del crimen, mientras que parientes de la víctima no pudieron contener el llanto al darse cuenta del hecho criminal.

En el lugar del delito quedaron al menos 200 casquillos de bala de metralletas AK-47, los que fueron levantados por técnicos de la Sección de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).

Según Medicina Forense, el pandillero recibió unos 140 disparos al grado que su cabeza quedó destruida.

Foto: El Heraldo

Peligroso pandillero
Manuel Isaac Durón, que vivió un tiempo en la colonia El Pedregal de Comayaguela, estaba recluido en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto, en Támara Francisco Morazán, en donde había cumplido 12 de los 30 años a los que fue condenado por el delito de asesinato.

Según investigaciones, 'El Dreamer' supuestamente era el tercero en liderazgo de la pandilla 18.

Foto: El Heraldo

Familiares del pandillero dijeron que su pariente sufrió quemaduras en el pecho al destapar una olla, aunque extraoficialmente se maneja que las lesiones fueron ocasionadas por enemigos que lo intentaron quemar vivo hace algunos días.

Para tratar sus heridas fue llevado al Centro Médico, pero se desconoce por qué la cita médica se programó para horas de la noche.

“Yo le pido a Dios que ponga su mano y castigue al que hizo esto. Era miembro de la ‘18’ y ya años estaba preso. Mi esposa fue a visitarle para hablarle de Cristo y miren lo que pasó”, dijo un tío político del marero.

Investigaciones
El custodio asesinado, que tenía 20 años de pertencer a la Policía Nacional y 10 de estar asignado a la Penitenciaría Nacional, era la persona que manejaba el vehículo en el que se movilizó al malogrado pandillero.

Agentes de la DPI tomaron declaración a los policías penitenciarios que sobrevivieron al ataque.

El fiscal y el perito forense de turno del Ministerio Público se presentaron junto a equipos de la DPI y de la Policía Preventiva a realizar el reconocimiento legal de los cadáveres. También estuvo presente la directora de Medicina Forense, Julissa Villanueva y otras autoridades.

Al centro asistencial también llegó un equipo élite de la DPI y luego de hacer algunas averiguaciones salieron del lugar, supuestamente, a ejecutar un operativo en otro punto de la capital.