Tegucigalpa, Honduras
En medio de una asamblea poco concurrida, la sociedad civil eligió ayer a sus 20 candidatos a la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
La jornada inició a las 8:30 de la mañana en el auditorio de la Universidad Católica de Honduras (Unicah) con la presencia de los representantes de 55 de las 107 organizaciones de la sociedad civil que participaron en la asamblea del 28 de agosto.
Los asambleístas conocieron en primera instancia el informe de la Comisión Técnica Jurídica que evaluó 78 hojas de vida, de estas solo 40 notarios cumplieron con los 21 requisitos solicitados por la Junta Nominadora.
Una vez escuchado el informe, la Comisión Electoral dio paso a las audiencias públicas de los 40 notarios, quienes fueron convocados a participar en la asamblea.
Para la evaluación, los asambleístas crearon 18 preguntas, a cada uno de los candidatos se les hicieron dos interrogantes, entre estas si el Poder Judicial es independiente, si existe seguridad jurídica en el país, si su familia lo respalda en el proceso, entre otras.
Uno de los participantes fue el director de fiscales Rolando Argueta, que al final de la jornada salió seleccionado entre los 20 candidatos.
Al togado se le practicaron las dos consultas, en una de ellas se le preguntó sobre su opinión de que un alto funcionario se postulara a magistrado de la CSJ.
En su respuesta, Argueta recordó a la asamblea la importancia de evaluar la conducta del funcionario, no solo en su vida pública sino que también en su parte privada, ética y moral.
De los 20 candidatos seleccionados, 10 fueron propuestos por la Confraternidad Evangélica de Honduras, otra de ellas la propuso el Centro de Prevención, Tratamiento y Rehabilitación de las Víctimas de la Tortura y sus familiares (CPTRT) que dirige el doctor Juan Almendárez.
En la lista de los 40 candidatos participaban cuatro magistrados, pero ninguno logró los votos para ser nominado por el sector sociedad civil.
Según Omar Rivera, coordinador de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), esta votación “es una muestra clara de la insatisfacción generalizada de la ciudadanía al pésimo desempeño del Poder Judicial”.
De los siete sectores que integran la Junta Nominadora solo falta la elección de dos: los empresarios y los obreros.
