El diputado Rodimiro Mejía, miembro de la Comisión de Presupuesto del Congreso Nacional, dijo que es el momento oportuno para que el Banco Central de Honduras (BCH) emita billetes de mil lempiras.
'Nos parece que en términos de eficientar la administración del efectivo', en transacciones 'bastante fuertes (...) es correcto la emisión de un billete de mil lempiras', que vendría a facilitar las operaciones de aquellas grandes transacciones, aseguró.
Como ejemplo, mencionó que en un retiro de cien mil lempiras 'el cajero tendría que estar contando 200 billetes de 500 lempiras, (con los billetes de mil) eso le reduciría el tiempo y atendería más clientes'.
Además, para el dueño del dinero es más fácil el intercambio de pagos o compra de mercadería, sostuvo el parlamentario hondureño.
La decisión de emitir billetes de mil lempiras 'viene a ser de un enorme beneficio, tanto para los comerciantes en general y para las personas particulares'.
Dijo que para concretar esta propuesta no es preciso ningún decreto, sino que tiene que ser una iniciativa del BCH, al que la Constitución le da las atribucioines en lo relativo a la emisión de la moneda.
'Lo importante es agilizar, eficientar, las transacciones que se realizan en dinero en efectivo', reiteró.
En contra
Por su parte, la expresidenta del Banco Central de Honduras y actual diputada por el Partido Liberal, Gabriela Núñez, se mostró contraria a la emisión de billetes de mil lempiras.
'Hay que hacer un análisis completo, por un lado el costo-beneficio, también sabemos que hay algunos sectores productivos que demandan mayor simplificación en el uso de la cantidad de billetes que pueden manejar', entre ellos empresas distribuidoras de bebidas y alimentos, así como gasolineras.
'Pero el resto de la población difícilmente anda un billete de 500 lempiras y si lo anda pues normalmente le cuesta encontrar cambio del billete'.
Señaló que el billete que más usa la mayoría de la población es el de 20 lempiras. 'Incluso por eso en algún momento se emitió un billete tipo polímero para darle más durabilidad'.
La decisión de emitir billetes de mil 'tiene que tener todo un respaldo de si la actividad económica requiere no solo una mayor demanda de billetes, sino también una denominación diferente'.
A su juicio, los billetes de a mil serían beneficiosos para unos sectores, pero no para la generalidad de la población 'que no tiene en la mayoría de los casos la posiblidad de tener un billete ni siquiera de 500'.
Mencionó que, según las estadísticas, el billete de menor uso y demanda es el de 50 lempiras, 'aunque es un billete autorizado tiene muy baja circulación' comparado con los de 1, 2, 5, 10 y hasta 20 lempiras.
Por su parte, el expresidente del Colegio de Economistas de Honduras (CEH) Guillermo Matamoros Arias, dijo que la emisión de un billete de mil lempiras 'no tiene ninguna implicación económica' para el país.
'Se puede hacer el billete de mil por la conveniencia' de facilitar las transacciones económicas y si se considera que hay que hacerlo, apuntó.
El tema es similar a 'cuando se cambia el nombre de la moneda, no tiene implicación de fondo en la economía' hondureña.
A su juicio, un billete de mil lempiras sí facilitaría las transaciones, 'pero tampoco es que sería un billete muy utilizado', ya que los que se usan más son los de menor denominación.
