Luego de una evaluación de confianza aplicada a 251 aspirantes a conformar las filas de la Policía Nacional de Honduras, la Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP) entregó este jueves un informe de resultados a las autoridades de la Secretaría de Seguridad.
Dicha evaluación fue aplicada en el marco del proceso de formación de nuevos agentes de la Policía Nacional, los cuales forman la promoción 80 del Instituto Tecnológico Policial Capitán General José Santos Guardiola.
Los aplicantes fueron evaluados mediante investigaciones psicométricas y aplicaciones de otros mecanismos de evaluación de confianza, a fin de establecer su idoneidad como futuros agentes policiales desde el momento de su incorporación al centro de estudios policiales.
En caso de obtener calificaciones satisfactorias y concluir su adiestramiento, los jóvenes 'tendrán la capacidad técnica y profesional, para desempeñarse eficientemente y de manera transparente en la función policial, con ética y efectividad en el marco conceptual de la Policía Comunitaria', afirmó la DIECP a través de un comunicado.
La DIECP ha reducido drásticamente la aplicación de pruebas de confianza de los miembros de la carrera policial y se ha enfocado en evaluar a aspirantes a ingresar a la entidad armada.
La Policía Nacional de Honduras viene sufriendo un pobre proceso de depuración desde 2011, cuando nació la DIECP como organismo encargado de investigar actos de corrupción en la institución y certificar la idoneidad de sus miembros.
Recientemente, la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, una de las promotoras de la depuración policial, lamentó que el proceso 'ha sido un fracaso'.
'El camino que hemos recorrido para tratar de que en la Policía hubiese un proceso de depuración, un proceso que definitivamente ha fracasado, que no se llevó a cabo como en el planteamiento original en el año 2011 cuando surgió la DIECP en cuanto surgió la idea y cuando se esperaba que hubiese voluntad política para hacerlo', dijo entonces la socióloga.
Durante 2013, investigó a 4,300 efectivos, lo cual derivó en la remisión de unas 50 resoluciones de despido para policías a la Secretaría de Seguridad.
Sin embargo, del medio centenar, solo siete se habían logrado separar a finales del año pasado por distintas anomalías.
