Honduras

Mineros hondureños rescatados relatan pesadilla en interior del túnel

Tres de los once mineros rescatados agradecen a Dios por darles una nueva oportunidad de vida. Durante las primeras horas escucharon a sus compañeros, pero luego reinó el silencio.

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04.07.2014

El Corpus, Choluteca

Por unos momentos sintieron que se enfrentaban a la muerte, sin embargo, la vida les ha regalado una nueva oportunidad.

Este viernes en horas de la tarde fueron rescatados tres de los once hondureños que mientras se ganaban el pan de cada día, quedaron atrapados bajo una mina en El Corpus, Choluteca.

Dos de ellos relataron que jamás volverían a entrar a esas minas porque lo que habían vivido, no lo querían repetir.

Brayan Alberto Escalante y Bayron Onassis Maradiaga, víctimas de la tragedia, se encuentran internos en la Clínica Santa María, mientras que Nehemías Rodríguez Muñoz, se encuentra hospitalizado en la Clínica San Rafael, ambas de Choluteca.

Los tres agradecieron a Dios por la segunda oportunidad de vivir y ruegan que sus compañeros corran con la misma suerte; sin embargo, sus relatos no son esperanzadores.

Cuando fueron revisados por los médicos, estos determinaron que se encontraban 'conscientes y lúcidos'; pero recordar lo que vivieron la tarde del miércoles, los envuelve en una pesadilla.

Bayron recuerda que luego de entrar en la mina, caminaba cerca de Bryan cuando sintieron que una piedra cayó sobre el túnel, dejándolos atrapados cerca de la entrada.

No obstante, el resto del grupo no corrió la misma suerte, excepto Nehemías, quien logró saltar hacia donde ellos se encontraban aunque la maniobra le provocó una fractura.

Durante las primeras horas escucharon a sus compañeros quejarse y gritar. Después no volvieron a saber de ellos. Según Bayron, la última vez que oyeron a los otros ocho mineros el reloj marcaba las casi las ocho de la noche.

Con el paso del tiempo, lo único que pudieron percibir en el estrecho túnel fue un mal olor proveniente de los escombros. Hasta el momento, las autoridades no han logrado localizar a los otros ocho mineros, por lo que no pueden confirmar su situación y si el olor que señala Bayron corresponda a algún cuerpo sin vida.

'Ojalá los encuentren con vida, porque son personas amigas de nosotros', dijo.

Dentro de la mina no comieron ni bebieron nada. Las últimas horas en las que permanecieron encerrados, se sentían débiles y su cuerpo casi sucumbía al sueño.

Los tres fueron revisados por un médico general y un internista, quienes les practicaron los chequeos correspondientes y determinaron que presentaban un episodio de hipertensión.

Continúa la búsqueda

A más de 48 horas de la tragedia, se desconoce la situación de los otros ocho obreros que no han podido ser ubicados.

El rescate total de los mineros se ha vuelto una tarea difícil por la topografía del terreno donde se ubicada la mina, lo cual se dificulta porque no hay acceso de maquinaria especial, afirman autoridades.

Especialistas internacionales se han sumado para facilitar la tarea y rescatar en cuanto antes a estos ocho hondureños.

El derrumbe se produjo el miércoles en la mina San Juan Arriba, unos 160 km al sur de Tegucigalpa, en una zona montañosa accesible solo en vehículos todo terreno.