Al ritmo de canciones como “Vamos a la playa” o la también famosa “Cuando calienta el sol” de Luis Miguel, estas imponentes hondureñas se desplazaron por los diferentes balnearios, centros veraniegos y playas en todo el país.
Ellas con su belleza, gracias y coquetería, fueron el centro de las miradas de todas las personas que a su paso les expresaban galantes piropos.
Esculturales mujeres que demostraron que las catrachas tiene porte y son verdaderas modelos de pasarela que bien pueden ser musas de reconocidos diseñadores.