TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Gustavo Adolfo Linares, quien fungió como chofer y hombre de confianza de
José Alberto Zelaya,
exjefe de compras, materiales y suministros del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), murió este lunes en el Hospital Escuela por complicaciones de salud.
Linares, quien tenía problemas de leucemia desde hace años, ingresó al centro asistencial desde el pasado 14 de junio y permaneció interno hasta la fecha.
El extinto hombre ligado al saqueo del IHSS cumplía una sentencia condenatoria de 11 años y tres meses por el delito de lavado de activos. Linares guardaba prisión en la Penitenciaria Nacional de Támara.
Según la autoridad, Linares trató de ofrecerse como testigo para evadir sus responsabilidades y confesó en esas pláticas lo que le pagaban por cada “vuelta”.
Linares, quien tenía problemas de leucemia desde hace años, ingresó al centro asistencial desde el pasado 14 de junio y permaneció interno hasta la fecha.
El extinto hombre ligado al saqueo del IHSS cumplía una sentencia condenatoria de 11 años y tres meses por el delito de lavado de activos. Linares guardaba prisión en la Penitenciaria Nacional de Támara.
Desfalco IHSS
El j efe de Compras, Materiales y Suministros del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), José Alberto Zelaya Guevara, pagaba en promedio dos mil lempiras a Gustavo Adolfo Linares Varela por cada cobro de cheque o “mandado” que hacía.Según la autoridad, Linares trató de ofrecerse como testigo para evadir sus responsabilidades y confesó en esas pláticas lo que le pagaban por cada “vuelta”.
Mire aquí: Testaferrato y lavado, entre delitos a imputar por desfalco al IHSS
Linares laboró como motorista de Guevara y formó parte de la estructura criminal que defraudó al Instituto Hondureño de Seguridad Social.
Según el expediente, el chofer de Zelaya cobró unos 239 cheques, que en total suman unos 35 millones de lempiras. Sin embargo, su participación no se limitaba a eso, también hacía pagos a otros miembros de la organización y mandados simples, como pagar servicios básicos y alquileres de las localidades de las empresas fantasma.
