Honduras

La Secretaría de Educación de Honduras vuelve a la senda de los ministros fugaces

Con la juramentación este miércoles de Arnaldo Bueso, tres ministros en menos de dos años han pasado como titulares de Educación, luego de la gestión de cinco años de Marlon Escoto

26.12.2018

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La Secretaría de Educación ha vuelto a ser una cartera de ministros fugaces. El gobierno de Honduras juramentó este miércoles como nuevo titular de Educación a Arnaldo Bueso, el tercero en el cargo en menos de dos años.

Bueso sustituye a Marcial Solís, quien apenas había sido juramentado en el puesto el 31 de enero de este 2018 ( una dirección de 11 meses). Este último reemplazó a Rutilia Calderón, cuya gestión en Educación tampoco fue duradera, apenas un año, ya que asumió el 25 de febrero del 2017.

Estos cambios ocurren luego de una senda de estabilidad que había alcanzado la Secretaría de Educación, al menos, en temas de coordinación, al mando de Marlon Escoto, ministro de este ramo desde el 25 de febrero del 2012 al 6 de enero del 2017.

Escoto también logró mantenerse en el cargo a pesar de un cambio de gobierno: estuvo sus primeros dos años con Pepe Lobo (2010-2014) y luego alcanzó cinco en la primera administración de Juan Orlando (2014-2018).

El nombramiento de Escoto causó incertidumbre y recelo en ese entonces, pues se consideraba un hombre muy afín a las filas de la izquierda y la resistencia política contra el golpe de Estado del 2009. Para el 2012, la educación en Honduras estaba sumida en una crisis por la falta de clases derivada de los desacuerdos entre los docentes, los estudiantes y el gobierno de Honduras.

No obstante, Escoto -en ese momento, también rector de la Universidad Nacional de Agricultura- dio un giro sorpresivo al desafiar a los frentes magisteriales. Uno de sus logros fue volver a los 200 días de clases, hecho que le valió probablemente su ratificación en el cargo con el gobierno de Hern  á  ndez en 2014. Pero su administración se vio opacada por la manera en qué manejó la crisis en la UNA, situación que lo obligó a renunciar.

Antes de Escoto, también se vivió inestabilidad en el ministerio, con seis secretarios en diez años.

Alejandro Ventura, llegado desde los colegios magisteriales, apenas estuvo dos años. Fue nombrado en el cargo en enero del 2010 con la esperanza de retornar a la normalidad la educación hondureña, afectada por crisis política del 2009. Salió en el 2014 por su incapacidad para resolver el problema de las huelgas de maestros.

El paso más fugaz fue el de Santos Elio Sosa, ministro de Educación por seis meses, durante el gobierno interino de Roberto Michelleti en el último semestre del 2009.

Aunque en el gobierno de Manuel Zelaya (2006-2009) también ocurrió el fenómeno de rodar cabezas en Educación. Zelaya nombró a Rafael Pineda Ponce (QDDG) al comienzo de su gestión, en 2006, y lo destituyó en 2007, por Marlon Brevé, quien estuvo hasta el golpe de Estado.

Ricardo Maduro (2002-2006) empezó su mandato con Carlos Ávila como su mano derecha en educación, pero en 2005 nombró a Roberto Martínez Lozano para dirigir la Secretaría de Educación.