Honduras

Honduras: La ansiedad y la depresión golpean a maestros en las escuelas y colegios

Las amenazas e intimidaciones de pandillas en escuelas encuentra también de víctimas a los docentes

21.06.2018

TEGUCIGALPA, HONDURAS

Rosa (nombre ficticio) es una maestra de un centro educativo de la capital.

Ella fue víctima de amenazas por una estudiante de secundaria. La profesora decidió abandonar su centro de trabajo por temor a perder su vida.

“La alumna fue a recuperación de la clase de Lectura y Lenguaje, cuando le dije que había reprobado, ella muy contundente me dijo: si no me pasa se la verá con mi mara”, reveló con temor la docente.

Ella cuenta que no tenía otra opción para salvar su vida.

Historias como estas se repiten cada vez más en los centros educativos de Honduras producto de la presencia de grupos antisociales, además de otros problemas que cargan los docentes.

Cada día son más los docentes que presentan problemas de salud emocional.

Mensualmente son tres casos los que atiende el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS). Las enfermedades más frecuentes son la ansiedad y la depresión.

Este aumento se debe a las preocupaciones por la inseguridad que se presenta en los diferentes centros educativos.

La doctora laboral del IHSS, Margarita Coello, afirma que “he visto el aumento en los trastornos de ansiedad en los maestros que desempeñan su labor en las escuela de alto riesgo”.

En muchos casos, los educadores se ven amenazados por grupos delictivos, por alumnos que consumen drogas o por personas infiltradas en las escuelas y colegios.

El médico psiquiatra Javier Uclés dice que “la docencia cada día es más exigente, les piden más eficiencia y les dan menos seguridad”.

“Hay profesiones muy difíciles en el país, pero en los últimos años la docencia se ha complicado debido a la inseguridad”, explicó Uclés.

El encargado de Riesgos Profesionales del IHSS, Jorge Gallardo, asegura que son peligros psicosociales y tienen muchos factores, pero el principal son las maras en las escuelas.

En lo que va del año, a la Dirección Departamental de Educación de Francisco Morazán han llegado 59 casos de docentes solicitando reubicación por que han sido víctimas de amenazas por pandillas.

Ese fenómeno que enfrentan los docentes viene a preocupar a las autoridades educativas porque hace que baje la calidad y concentración en las aulas de clases.

Estrategias
La Secretaría de Educación en conjunto con la Policía Nacional y las departamentales trabajan para mejorar la seguridad en los centros educativos donde han sufrido atentados.

Actualmente son 56 escuelas y colegios a nivel nacional que cuentan con presencia policial, pero son más de 700 institutos que tienen problemas de pandillas, según las autoridades educativas.

En la capital hay 22 centros afectados por la inseguridad, los cuales tienen presencia policial.

Como medida de prevención se ha implementado desde el año pasado impartir charlas sobre antiviolencia a niños y jóvenes en todo el país.

Otra estrategia que realizan las departamentales es reubicar a los docentes de los centros donde han sido amenazados.

“Lo que más cuidamos nosotros es la seguridad de los docentes y su salud mental”, dijo Josué Cruz, encargado de Talento Humano de la Dirección Departamental de Educación.

Según autoridades educativas, los departamentos que presentan más problemas de violencia en los institutos son Francisco Morazán y Cortés.

En los últimos meses se han incrementado los casos en que los maestros se ven involucrados en amenazas, como ocurrió el año pasado con el asesinato del profesor Mario Alberto Morazán del Instituto Técnico Honduras de la capital.