Tegucigalpa, Honduras
Diversos sectores de sociedad hondureña coinciden en que el país no debe perder la paz. En ese sentido, hicieron un llamado a los candidatos presidenciales a esperar el recuento de votos por parte del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y llamar a sus seguidores a la calma por el bien de Honduras.
Todos son del criterio que debe reinar la calma y la prudencia, con el fin de mantener el orden entre la ciudadanía.
Académicos, analistas, obreros y empresarios consultados indicaron que una de las vías para mantener la tranquilidad pasa por aceptar la Declaración por la Democracia Hondureña, que fue facilitada por la Organización de los Estados Americanos (OEA) y que fue firmada por el candidato del Partido Nacional, Juan Orlando Hernández, y por el líder de la Alianza, Salvador Nasralla, quien horas después se retractó del compromiso. Él suscribió el compromiso sin la autorización del expresidente Manuel Zelaya.
Este acuerdo fue presentado por la misión de observadores de la OEA y contenía tres puntos: el primero, pedía a los simpatizantes de ambas corrientes políticas esperar los resultados del escrutinio en un ambiente de paz y calma.
El segundo punto exhortaba al TSE a actuar con diligencia e imparcialidad. Finalmente, el tercer punto comprometía a los candidatos a aceptar los resultados del escrutinio final con la garantía de que se contabilizaran los votos de todas las actas, incluyendo las que deben ser procesadas de manera especial por tener inconsistencias.
Para algunos líderes de opinión, lo que en este momento necesita el país no es disturbios ni divisiones sino voluntad para trabajar.
Argumentan que negarse a aceptar el acuerdo no es un buen mensaje ni para los hondureños ni para los países que observan el proceso electoral.
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